¿Cuál es el embalse más grande de Chile?
En 2009 se registró en Chile el verano más caluroso en casi 100 años. En ese entonces, se desconocía que ese sería el comienzo de una megasequía que se ha mantenido hasta la fecha.
Lo anterior trajo una serie de consecuencias negativas como, por ejemplo, que varios embalses comenzaran a quedarse sin agua, afectando directamente al sector agrícola.
El invierno de 2023 parecía dar una pequeña tregua a la crisis hídrica, y es que el fenómeno de El Niño dejó varios récords de precipitaciones en Santiago. De hecho, ese año se transformó en el más lluvioso desde 2005.
Sin embargo, expertos pronostican que en los próximos meses se hará presente el fenómeno de La Niña, que es totalmente opuesto, lo que significaría menos precipitaciones y un ambiente más frío.
¿Cuál es el embalse más grande de Chile?
Los embalses cumplen una función de gran relevancia en este contexto, ya que actúan como un gran depósito de las aguas que se pierden por escurrimiento. De esta manera, son aprovechadas durante los períodos en que se origine un déficit.
Este sistema puede ser utilizado para diferentes funciones: regadío, abastecimiento a la población o industrias y en la producción de energía eléctrica.
Los embalses suelen ser construcciones artificiales, en los que se levanta una presa que interrumpe el curso del agua. Eso sí, también puede ocurrir que se formen de manera natural, como sucede en el caso de algunos lagos.
En Chile, el embalse artificial de mayor tamaño es el Colbún, ubicado en la región del Maule, el cual cuenta con 5.700 hectáreas y 1.490 millones de metros cúbicos. La calidez de sus aguas en periodo estival permite que sea ampliamente utilizado para la práctica de deportes náuticos.
También existe un embalse de tipo natural que se encuentra entre los más grandes del país. Se trata del embalse La Laja, una laguna inserta en la comuna de Antuco, en la región del Biobío.
En el último reporte hidrológico del Ministerio de Obras Públicas (MOP), se informó que se logró un superávit del 8,9% de agua respecto a 2023, resultados que revierten los indicadores negativos que había dejado la sequía.
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