Mata a su vecino porque no lo dejaba dormir: le reclamó varias noches por poner música con alto volumen
- Por Meganoticias
Antonio José Cano Vergara no toleró el ruido que generaba cada noche Jhonatan Andrés Arenas Ossa. Luego de varios días de reclamo, el hombre mató a su vecino porque no lo dejaba dormir. En el tiroteo también hirió a Kevin Arley Valencia Soto.
Cano Vergara pasará 10 años y un mes en la cárcel por este hecho ocurrido el 6 de septiembre de 2021 en el sector El Vergel del corregimiento San Antonio de Prado, en Medellín, Colombia. La condena fue emitida por un juzgado de la capital de Antioquía.
#HayJusticia | Condenado hombre que asesinó a otro por hacer ruido cerca de su casa. Luego de avalar el preacuerdo entre Fiscalía y defensa, un juez condenó a 10 años y 1 mes de prisión a Antonio José Cano responsable del homicidio de Jhonatan Arenas.https://t.co/GHVZfccR4m
— Fiscalía Colombia (@FiscaliaCol) August 17, 2022
El día del asesinato, a eso de las 5:43 de la tarde, Jhonatan, de 28 años, y Kevin, de 21, estaban conversando en la vía pública cuando Antonio José los abordó para quejarse una vez más por el alto volumen de la música, reseñó la revista Semana.
El reclamo generó una violenta discusión entre los hombres. La confrontación verbal se mantuvo un rato hasta que Antonio José sacó un arma de fuego y mató a su vecino de varios disparos. Según testigos, el asesino se encontraba en estado de embriaguez.
En medio de la balacera, el sujeto hirió también a Kevin Arley, quien fue impactado a nivel de la cadera y atendido posteriormente en el hospital La María, de Castilla, logrando recuperarse, publicó el portal El Colombiano.
Se declara culpable por matar a su vecino que no lo dejaba dormir
“Se logró determinar que el procesado le reclamó a Arenas Ossa porque presuntamente, desde hacía varios días, el ruido que la víctima causaba no le permitía conciliar el sueño”, aseguró la Fiscalía General de Colombia en un comunicado.
Antonio José Cano Vergara se declaró culpable. “Ante la contundencia del material probatorio recaudado por la Fiscalía, el condenado aceptó su responsabilidad por los delitos de homicidio, tentativa de homicidio y porte ilegal de armas de fuego”, relató el juez.
La defensa y la Fiscalía llegaron a un preacuerdo previo a la sentencia emitida el 18 de agosto. El ataque fue calificado como sicariato. La defensa solicitó detención domiciliaria, pero esta fue negada por el juzgado, decisión apelada ante la Sala Penal del Tribunal Superior de Medellín.
Según recogió El Colombiano, la víctima no residía en el sector donde lo mataron, pero frecuentaba el lugar. Tenía tres antecedentes penales por porte y tráfico de estupefacientes y otra por calumnia.
