"Documenté el calvario" del huracán Ian: Nadó por más de un kilómetro para rescatar a su madre en silla de ruedas
- Por Ana María Lizana
En Naples, Florida, Estados Unidos, el devastador huracán Ian dejó desoladoras imágenes de la ciudad, tales como calles inundadas, casas destruidas y personas damnificadas. En medio del desastre, un joven nadó un kilómetro para salvar a su madre en silla de ruedas.
Johnny Lauder es el protagonista de esta historia, quien nadó en medio de las inundadas calles de Florida para ir en rescate de su madre, quien se negó a ir a un refugio y decidió quedarse en casa.
Cabe recordar que la semana pasada el huracán arrasó la península de Florida, con vientos de hasta 240 kilómetros por hora, siendo uno de los fenómenos más poderosos en décadas.
Estaba con hipotermia
Karen, una mujer de 84 años, se encontraba atrapada en su propia casa debido al huracán Ian. Pensando que la situación no sería tan grave, se quedó en su domicilio.
Pese a la insistencia de sus familiares de que se fuera a un refugio, ella desistió. Sin embargo, el agua comenzó a subir, inundándose la vivienda y peligrando su vida.
A causa de ello y ante la desesperación, llamó a su hijo Johnny, un buzo experimentado, pidiéndole que la fuese a ver, ya que el nivel del agua la había superado en altura.
Así comenzó la odisea de Lauder, quien nadó entre escombros y contra la corriente para poder salvar a su madre que estaba atrapada.
La mujer que estaba con el agua hasta el cuello, fue encontrada por su hijo con signos de hipotermia. Por ello, la envolvió en una cobija y salió junto con ella, procurando cuidar las heridas que tenía que estaban abiertas.
Esperaron al menos tres horas, lo suficiente para que el agua bajara y la sacó en su silla de ruedas. Una vez fuera, Johnny llamó a su hijo para ayudar a cargar a su abuela a una zona segura.
"Documenté el calvario"
En conversación con CTPost, el hombre cuenta que mientras iba camino a rescatar a su madre, envió fotos y videos a su familia: "Así es como sin querer documenté todo el calvario".
Johnny cuenta que mientras iba nadando, camionetas y autos pasaban a su costado, intentando alejarse lo más posible de los postes eléctricos que estaban destruidos.
"Fue una sensación de terror y alivio al mismo tiempo. El terror era que no sabía si estaba bien, estaba herida o estaba atrapada. Pero el alivio fue saber que todavía mi mamá respiraba", dijo una vez la encontró.
Tras el rescate, la mujer fue trasladada hasta un hospital donde está siendo tratada y estando en una "cama cómoda. Ella está bien".
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