Podría aparecer si tienes diabetes: Estos son los síntomas comunes de la neuropatía periférica
Neuropatía periférica es el nombre con que se conoce al daño de las conexiones neuronales que se encuentran en los sitios más alejados del sistema neurológico central, cerebro y columna vertebral. Este problema médico suele afectar las manos, pies, brazos y piernas.
Existe una variedad de tipos de neuropatías que pueden afectar a un paciente. Por lo general, se dividen en la cantidad de nervios que están afectados: si es solo uno se le denomina "mononeuropatía" (como el síndrome del túnel carpiano); si son dos o más nervios dañados, pero en más de un punto de estos, "mononeuropatía múltiple". En caso de que sean más, se le llamará "polineuropatía".
También podrían ser clasificados según el tipo de nervio periférico que esté afectado. Este sistema está compuesto por nervios motores, sensores y autónomos.
¿Por qué ocurre la neuropatía?
Son múltiples las razones que podrían explicar la presencia de este malestar. Existen casos de neuropatías hereditarias o genéticas, pero son casos extremadamente raros y suelen presentarse desde la infancia, con la enfermedad Charcot-Marie-Tooth.
Es más frecuente encontrar casos que se producen por lesiones o accidentes traumáticos, fracturas óseas, enfermedades autoinmune, desbalances hormonales, complicaciones de la diabetes, desórdenes de los riñones, ciertos tumores e infecciones que atacan directamente los nervios.
¿Cuáles son los síntomas?
Dependiendo del tipo de neuropatía que se trate y de los nervios específicos que se vean afectados, las señales de este problema médico podrían variar.
Pero según explican desde la Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins, algunas de las manifestaciones más habituales de las neuropatías periféricas son:
- Hormigueos o adormecimiento de la zona afectada.
- Dolor severo, sensación de quemazón o parálisis.
- Debilidad muscular.
- Calambres.
- Espasmos o fasciculaciones musculares (cuando saltan).
- Adormecimiento.
- Pérdida de la sensibilidad en diferentes sitios del cuerpo.
- Pérdida del equilibrio o de la funcionalidad de las extremidades.
- Interrupciones en el sueño.
- Incapacidad para sudar bien o intolerancia al calor.
- Problemas para comer o tragar.
Estas manifestaciones clínicas también podrían indicar una variedad de enfermedades o condiciones diferentes, por lo que los expertos recomiendan que si las identificas recurrentemente, mejor busques ayuda médica para confirmar cualquier diagnóstico.
Este artículo está diseñado para informar y no pretende dar consejos o soluciones médicas.
Consulte siempre a su doctor o especialista si tiene dudas sobre su salud o antes de iniciar un tratamiento.
Leer más de
