La fruta que te mantendrá hidratado y que tiene la menor cantidad de calorías
Dulce, refrescante, y llena de vitaminas y antioxidantes, la sandía es ideal para las personas que están a dieta.
De la familia de las cucurbitáceas, la misma de los zapallos, melones y pepinos, las sandías son fáciles de encontrar en verano, pero si estás muy antojado (y tienes suerte) perfectamente te podrías comer una porción en invierno.
Al ser una fruta, es un alimento sano, sin elementos procesados y poca azúcar. Conoce todos los beneficios que puedes obtener de alimentarte con esta fruta:
Te mantiene hidratado
Es perfecta para las personas que no toman suficiente agua, ya que para el consumo de líquidos se cuentan tanto los vasos como el aporte que entregan los alimentos.
Cerca del 92% de la sandía es agua y aporta electrolitos, como el potasio, que te ayuda a la recuperación.
Dolor muscular
Comer sandía te podría ayudar a reducir el dolor muscular. Luego de un estudio en atletas, se descubrió que si tomaban jugo de sandía sentían menos molestias y tenían una mejor recuperación del corazón.
Esto porque contiene citrulina, un aminoácido que actúa sobre la musculatura. Además, la fruta ayuda a la absorción del mismo compuesto.
Bajo en calorías
La gran cantidad de agua, que te mantiene hidratado, con el alto contenido de fibra, que garantiza que te mantengas saciado, la hacen ideal para no subir de peso.
En 100 gramos de fruta, solo te aportarán 21 calorías. Además, contienen menos azúcar por porción que cualquier tipo de berry. Además de aportar antioxidantes como: carotenoides, licopeno, vitamina C y curcurbitacina E.
Mejora el cabello y la piel
La presencia de vitamina A y C en la fruta puede ayudar con tu apariencia. Es que la producción de colágeno, que mantiene tu piel tersa y aparentemente joven, depende de la vitamina C. Mientras que la vitamina A repara la piel seca y escamosa.
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