Por una "lista negra": Corte de Apelaciones falla a favor de colegio que dejó sin graduación a cuatro alumnos
- Por Lucas Figueroa
¿Qué pasó?
Infructuoso fue el recurso de protección interpuesto por los padres de cuatro estudiantes del Colegio Sagrados Corazones de Concepción, luego de que el establecimiento dejara a los pupilos de aquellos apoderados sin ceremonia de graduación de cuarto medio el año pasado, a modo de castigo por haber participado en la elaboración y difusión a través de redes sociales una "lista negra".
Esto, luego de que la Corte de Apelaciones de esa ciudad rechazara la acción de los padres. De acuerdo a lo que consigna LUN, en total fueron 22 los jóvenes los que habrían estado vinculados a un grupo de WhatsApp donde se difundió la denominada "lista negra".
A través de ese medio se realizaban agresiones verbales y descalificaciones a otros estudiantes e incluso a profesores.
La medida adoptada por el colegio fue dejar a los hijos de los demandantes sin la ceremonia, siendo estos los más perjudicados porque, si bien el resto de los involucrados también recibió una sanción, no fue tan dura como la de los primeros.
Los castigos recibidos por los estudiantes
Al respecto, Rolando Ramírez,abogado de los apoderados, asegura que le quedan dudas respecto a la deliberación.
"El punto del alegato no se trata de eludir responsabilidades ni validar el ciberbullying. El reclamo es porque consideramos que el colegio no respetó los estándares mínimos del debido proceso, derecho de defensa y rendición de pruebas", dice.
Desde ese punto de vista, asegura que sus cuestionamientos no son del castigo en sí, sino de "cómo determinaron esa sanción, cómo llegaron a esa conclusión en su investigación".
Específicamente, se establecieron distintas sanciones, de acuerdo al nivel de participación que habrían tenido los estudiantes: primaria, secundaria y terciaria.
En la participación primaria, donde fueron sindicados los cuatro estudiantes, estos fueron apuntados como los responsables de "gestar, organizar y liderar la elaboración de la lista negra". Además de quedar excluidos de la ceremonia en cuestión, también fueron apartados de una jornada de firma de libros de egresados. De la misma manera, debieron emitir disculpas públicas.
Quienes tuvieron una participación secundaria, habrían aportado "nombres de otros estudiantes y profesores y/o apelativos a ellos en la lista negra. También tuvieron que escribir una carta de disculpas y no pudieron participar de la ceremonia de firma de libros de egresados.
Finalmente, aquellos que figuran por tener una participación terciaria, habrían hecho comentarios sobre esta lista, pero sin proponer nombres ni apelativos. En estos casos, el castigo fue tener una conversación "reflexivo-formativa con un sacerdote de la comunidad".
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