"Ahora sé para qué era útil": La historia del chileno que vendió su camión y se fue a combatir por Ucrania
En medio del desarrollo de la invasión de Rusia sobre Ucrania, este miércoles se conoció la historia de un excarabinero chileno, oriundo de Iquique, quien se fue hasta el país asediado para unirse a la "Legión Extranjera para la Defensa Territorial de Ucrania".
Se trata de Luis Lagos Torres, exuniformado de 46 años, quien señala que su intención es ayudar a las personas que están sufriendo en territorio ucraniano.
Según se tiene conocimiento hasta ahora, Lagos es el único chileno que se encuentra combatiendo en la zona. Específicamente, forma parte de una unidad militar internacional en la frontera ucraniana con Polonia. Su adaptación fue rápida, ya que ha vivido en Alemania y otros países europeos.
¿Qué dijo Lagos?
“Para mí es un orgullo ser iquiqueño y es un privilegio estar acá en Ucrania", comenzó señalando el uniformado al diario La Estrella de Iquique.
Eso sí, advierte que "yo no vine a una fiesta ni al Lollapalooza acá en Ucrania. Es una situación completamente grave; anoche atacaron un campo cerca donde hubo cien personas muertas".
"Disparan a matar"
En relación con lo que ha podido palpar en la zona del conflicto, Lagos señala que "acá los rusos cuando toman una ciudad disparan a matar y no les importa quién sea, si es una madre con un hijo, tiran a matar".
En paralelo, señala que "no es una guerra, porque no hubo un incidente previo, es una invasión. Los ucranianos están luchando ferozmente, los controles en todas las esquinas en las ciudades son exhaustivos, incluso violentos. Si tú eres extranjero ya no puedes transitar en las ciudades".
"Ahora sé para qué era útil"
Consultado por sus motivaciones para ir a Ucrania, Lagos señala que "pensé que como todas las personas he cometido muchos errores, y adquirí mucha experiencia en varias cosas y estudios. Y nunca supe para qué los iba a aplicar. Ahora sé para qué era útil, y la vida es muy sabia. Da oportunidades".
Finalmente, el excarabinero señaló que vendió un camión para poder tener los recursos para inscribirse como voluntario.
"Un día o dos días antes me presenté en la embajada ucraniana en Santiago y me dieron los contactos… yo me costeé mi pasaje. Conozco Europa bien, estuve en algunos países, pero me fue más fácil", finalizó.
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