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Subsidio Familiar (SUF): En estos casos se pierde el beneficio

El Subsidio Familiar (SUF) es un beneficio que protege a la población vulnerable, y más específicamente, cuando se trata de núcleos que albergan menores de edad.

Esta ayuda mensual puede ser solicitada por personas que sean padres/tutores, sin previsión social y pertenecientes al 60% de la población más vulnerable en términos socioeconómicos, según el Registro Social de Hogares (RSH).

Según ChileAtiende, en el caso de que el grupo familiar pertenezca al 40% más vulnerable y se tengan menos de 18 años, la bonificación se otorga de manera automática.

El monto otorgado por el Subsidio Familiar es de $22.007 por cada carga familiar declarada. En el caso de que en la familia haya una persona con discapacidad el monto se duplicará, otorgando $44.014.

¿En qué casos se pierde el Subsidio Familiar?

El Subsidio Familiar se puede perder en ciertos casos específicos. El primero de ellos es si se deja de cumplir con alguno de los requisitos estipulados.

También se pierde si no se presentan todos los antecedentes solicitados por el municipio para acceder al SUF.

Si la persona causante o beneficiaria llegara a fallecer o si se cumple el plazo legal de tres años, también se pierde la ayuda.

Renuncia al SUF

Hay dos casos en los que se debe renunciar al beneficio. El primero de ellos es cuando se comienza a trabajar formalmente, y se debe presentar el contrato de trabajo ante el municipio para prescindir de la ayuda.

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El segundo caso es cuando se recibe una pensión incompatible con el SUF como persona beneficiaria o causante. Para estos fines se debe presentar la resolución o decreto que otorga la pensión.

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