Estudio afirma que el gusto por el chocolate amargo y el café negro está vinculado a la genética
Los amantes del café negro y del chocolate oscuro podrían encontrar las respuestas ante su preferencia en una base genética, según lo que sugiere un nuevo estudio científico.
Esta bebida oscura tiene numerosos efectos cardioprotectores en su composición, y si se consumen tres tazas al día, es capaz de ayudar a prevenir diversas enfermedades.
Por su parte, la preparación del cacao se relaciona con sensaciones de felicidad, debido a que se reducen los estados de ánimo negativos de quienes lo consumen. Además, reestructura la composición del microbioma intestinal, tiene un alto contenido de flavonoles y protege las arterias coronarias.
Así se explica el gusto por el café negro y el chocolate amargo
Un nuevo estudio identificó una base genética que explica las preferencias por el chocolate amargo y el café negro. Marilyn Cornelis, profesora de Medicina de la Universidad Northwestern, en Estados Unidos, afirma que este es un rasgo que ofrece impulsos hacia la buena salud.
"Sabemos que hay cada vez más pruebas que sugieren que el consumo de café tiene un impacto beneficioso en la salud. Pero leyendo entre líneas, cualquiera que aconseje a alguien que consuma café le recomendaría consumir café negro, debido a la diferencia entre consumir café negro y café con leche y azúcar", explica la experta, según confirma el medio CNN en Español.
Previamente, el equipo dio con la variante genética que hace que unas personas disfruten la ingesta del café más que otras. Ello responde a que quienes tienen el gen, metabolizan la cafeína más rápido y los efectos estimulantes desaparecen tan pronto que necesitan consumir más.
Esta es la variante genética del estudio
El estudio, publicado en la revista Nature, encontró que los poseedores de la variante genética prefieren el café negro amargo, así como el chocolate oscuro y el té simple. Cabe destacar que el gusto no se relaciona con el sabor, sino con el aumento del estado de alerta mental que ansían de la cafeína.
"Cuando piensan en la cafeína, piensan en un sabor amargo, así que también disfrutan del chocolate negro. Es posible que estas personas sean muy sensibles a los efectos de la cafeína y también tengan ese comportamiento aprendido con otros alimentos amargos", indican los autores.
Los alimentos amargos generalmente están vinculados con beneficios para la salud, según Cornelis. Una muestra de ello es que las personas que consumen más café suelen estar involucradas con otros comportamientos potencialmente saludables.
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