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Productora de arándanos del Maule se va la quiebra: Incumplió acuerdo para pagar deudas de $87 mil millones

Por incumplir el acuerdo de su reorganización judicial, finalmente la agrícola Arroyo Grande Limitada admitió su quiebra, propiciada por una deuda que supera los $87 mil millones, según datos que entregó a la justicia civil en abril de 2024.

Por esa fecha, la autodenominada "líder en la producción de arándanos" solicitó la apertura de un proceso de reorganización en el que detalló su sensible estado financiero, además de las causas de su crisis económica. Ya en septiembre, los acreedores aprobaron su estrategia para ponerse al día con las obligaciones. 

Dicho plan prometía pagar las acreencias, repactándolas en plazos; la continuación de sus operaciones para generar ingresos y mantener su participación en el mercado; reestructurarse corporativamente y disminuir su plantilla de trabajadores; y el ingreso de un tercero para asesorarlos en materia administrativa.

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Con la aprobación, se pensaba que Arroyo Grande estaba a salvo, pero uno de sus acreedores presentó una nueva demanda que cambió todo el panorama, al punto que la empresa afrontará su pronta liquidación.

Los motivos de la crisis de la agrícola

En abril del año pasado, la compañía radicada en Pencahue, en la región del Maule, señaló que su crisis financiera era por tres situaciones:

  • Un evento de lluvias anormales en enero de 2022 y la posterior manifestación del "fenómeno del niño" en la temporada 2023-24.
  • Pandemia del coronavirus y sus efectos en los costos logísticos, restricción de movilidad y logística naviera.
  • Guerra entre Ucrania y Rusia.

"La sociedad ha hecho todos los esfuerzos posibles para solucionar los problemas (...) Incluso, logró una inyección de fondos de inversionistas, el cual no ha sido suficiente para salir de la compleja situación financiera", aseguró meses antes de obtener la aprobación a su plan.

La nueva demanda que puso la lápida

El 30 de mayo de 2025, la empresa de seguridad privada, Head Service —a la que le debe un crédito de casi $26 millones—, demandó el incumplimiento del acuerdo por parte de la agrícola, acusándola de no pagar las cuotas del préstamo en las fechas acordadas, así que exigió que la justicia declarase su quiebra.

Por este atraso, a la productora no le quedó más opción que rendirse. Mediante su abogado, el lunes 28 de julio manifestó que "pese a los esfuerzos de Arroyo Grande, no fue posible cumplir con el acuerdo de reorganización aprobado en septiembre de 2024, debiendo proceder a su liquidación".

Si bien falta el pronunciamiento oficial del tribunal civil para determinar la quiebra, las próximas etapas del proceso son la liquidación de los bienes de la compañía, correspondientes a fundos agrícolas. Lo que se recaude será repartido entre los acreedores.