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Senadores gastan $258 millones en oficinas parlamentarias: Cruz-Coke, Edwards y Kast lideran distintos rankings

En tiempos de crisis económica, uno de los grandes dolores de cabeza es pagar a fin de mes el arriendo de la vivienda. Sin embargo, este problema que aflige a gran parte de los chilenos no parece afectar a los 50 senadores, quienes gastan hasta 2 millones y medio al mes por oficinas parlamentarias adicionales a aquellas de las que disponen en el Congreso.

Mega Investiga analizó los pagos relacionados a oficinas que han hecho los senadores entre marzo y julio de este año. En esos cinco meses, gastaron $258 millones en arriendo, equipamiento y mantención de oficinas parlamentarias. El monto que disponen para ese concepto, es adicional a los siete millones de pesos bruto que reciben como dieta.

Senador Cruz-Coke lidera el ranking y le arrienda a un ex socio

El ranking de los senadores que más gastan en arriendo de oficinas lo lidera un reconocido actor de teleseries y ex ministro de la Cultura y las Artes bajo el primer mandato del expresidente Piñera. Se trata del senador Luciano Cruz-Coke (Evópoli), quien gastó más de 12 millones de pesos en el arriendo de una oficina parlamentaria, un monto dos veces superior al promedio de lo que gasta el resto de los senadores.

Al ser consultado por estos gastos, asegura que “es una oficina que tiene todos los gastos cubiertos: internet, agua, luz, estacionamiento, bodega. Y lo que se hace es actividad parlamentaria: se reciben personas, se hacen reuniones, la ocupo principalmente durante la semana regional”.

El senador Cruz-Coke le arrienda el inmueble a una sociedad llamada Mosaiko Producciones. Mega Investiga revisó la constitución de esa empresa y constató que pertenece a Juan Carlos Salfate, un ingeniero muy cercano al senador. De hecho, en 2008, Salfate, Cruz-Coke y el actor Felipe Braun crearon la productora L90 Cine Digital. Aunque en 2010 el parlamentario dejó de ser socio de la productora, no cortó el vínculo con Salfate, quien agradece públicamente al senador el haber podido emprender juntos y ser amigos.

Consultado sobre la pertinencia de arrendar una oficina con dinero del Congreso a un ex socio y amigo, el senador asegura que “he hecho la consulta al comité resolutivo de asignaciones parlamentarias y no hay ninguna prohibición expresa al respecto. Las prohibiciones expresas pesan sobre los familiares”.

Quien tiene el segundo lugar en la lista es el senador Daniel Núñez (PC), quien gastó $10,2 millones entre marzo y julio por cuatro oficinas en la región de Coquimbo. “Son todos los valores de mercado, son oficinas que nosotros contratamos a gente totalmente ajena a nosotros, que no tenemos ningún vínculo con ellos y todos los contratos están visados y aceptados por el Senado”, declaró.

Cerrando el top 3 está el senador de Antofagasta, Pedro Araya (ex DC), con un gasto de $9,7 millones. “En mi caso personal, yo tengo cuatro oficinas y debo ser uno de los parlamentarios que más oficinas tiene en la circunscripción que representa. Estos gastos, lo primero que hay que señalar, es que son dineros que paga directamente el Senado al dueño del inmueble, no son dineros que pasan por los parlamentarios. Y este gasto cubre arrendamiento, pago de servicios básicos, como son luz, agua, telefonía, servicios de aseo, entre otras cosas”, aclara.

El ex senador Rabindranath Quinteros es presidente del Consejo Resolutivo de Asignaciones Parlamentarias y asegura que "los gastos de estas instalaciones deben ser racionales y razonables, evitando todo gasto excesivo en cuanto al inmueble y a su equipamiento”. Ante alguna irregularidad que pueda detectarse, esta “debe ser sancionada por la respectiva cámara”.

Por su parte, Juan José Lyon, director ejecutivo de América Transparente, asegura que debe existir más control sobre estos ítems. “Nadie es un bien fiscalizador de sí mismo, entonces llama la atención de que cada vez que el parlamento regula algo para sí mismo, no se toca”, critica.

$87 millones en equipamiento de oficinas: lidera el senador Rojo Edwards

El Senado también paga los gastos de equipamiento de las oficinas de los legisladores. Por este ítem, los 50 senadores gastaron $87 millones en la compra de computadores, equipos y electrodomésticos básicos para estos inmuebles.

El análisis de datos muestra que solo tres congresistas gastaron más de $8 millones en este concepto.
Quien lidera la lista es Rojo Edwards (REP) que desembolsó más de $11 millones, nueve de los cuales se pagaron en abril.

Consultado por este gasto, el senador Edwards asegura que fue una compra justificada de computadores marca Apple. “Sí, nosotros tenemos un equipo y se compraron computadores. Y por lo tanto un par de computadores ya llega a esa cifra, pero se han podido ocupar muy bien, están todos, los puede revisar si quiere”, afirma.

En el listado de gastos por equipamiento, el siguiente es Iván Flores (DC) con $8,7 millones y Alejandro Kusanovic (Ind) con poco más de $8 millones.

Senador Kast lidera gasto en mantenimiento

En otros gastos de mantenimiento de oficinas parlamentarias, los senadores pagaron $17,5 millones. En primer lugar destaca el senador Felipe Kast (Evópoli) con más de $5 millones.

El senador Kast explica por escrito que los gastos se deben a que los primeros 4 años de su período compartió oficina con dos diputados que dejaron el Congreso, teniendo que cambiarse de oficina para este período. “Para la habilitación de la misma, tuve que ahorrar recursos en los meses anteriores a Marzo (Enero y Febrero por un total de $6.100.000), y usar parte de esos recursos ($5.520.000) en la habilitación de la misma a partir de Marzo, que incluye pintura, separaciones de espacios (es una planta abierta), 4 escritorios con sus sillas, y el arreglo del piso”, dice en el mensaje enviado a Mega Investiga.

Desde lejos lo sigue la senadora Carmen Gloria Aravena (Ind) con cerca de $2 millones, quien explica que el gasto corresponde al servicio de aseo de sus cuatro oficinas en la novena región.

La directora ejecutiva de Chile Transparente, María Jaraquemada, asegura que “necesitamos mayores controles para ver que se está gastando el dinero en lo que está previsto y en caso de que no sea así también mayores sanciones”.