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Mauricio Morales y Cadem sobre NC: "Los partidos van por un carril y la ciudadanía por otro"

El académico de la Universidad de Talca, Mauricio Morales, analiza los resultados de la Encuesta Plaza Pública de Cadem con respecto al grado de aprobación del Presidente Gabriel Boric y también sobre las opciones que se barajan para contar con una Nueva Constitución o reformar la actual. Su análisis es el siguiente:

El Presidente Gabriel Boric no repunta en su aprobación y ésta retorna a niveles similares a los registrados después del Plebiscito, con una aprobación del 35% y una desaprobación del 59%.

A pesar de su participación internacional en la ONU y del activo rol de su gabinete, particularmente en Interior y Segpres, las deterioradas expectativas económicas de los chilenos parecen ser predominantes a la hora de evaluar al Mandatario.

Respecto al proceso constitucional, el 71% está por reiniciarlo luego del triunfo del Rechazo. Adicionalmente, la mayoría (51%) prefiere un plebiscito que dirima entre cambio de Constitución o reforma a la actual, mientras que sólo 41% se inclina por un acuerdo político para escoger una nueva Convención.

Estas cifras se entienden en el contexto del abultado triunfo del Rechazo y la mala imagen que la Convención dejó a los chilenos. No hay ánimo para replicar el mismo mecanismo de redacción de la Nueva Constitución, e incluso hay una evidente división entre quienes quieren reformar la actual o escribir una nueva (49% cada una).

Visto así, el impacto de la pasada Convención sobre las preferencias constitucionales de los chilenos es particularmente nítido. Si bien es comprensible que una minoría apoye una Convención 100% electa y que el 61% respalde una Convención Mixta con participación de expertos y representantes electos, dada la experiencia reciente con la CC, es evidente el retroceso en la popularidad del cambio constitucional.

Los chilenos quieren avanzar en ese cambio, pero la mitad quiere hacerlo vía "reforma" del actual texto y la otra mitad apoya un cambio de Constitución. Esta diferencia no es menor, pues el acuerdo que discuten los partidos no hace referencia a un proceso reformista del actual texto, sino que a la redacción de uno nuevo.

Además, ha venido perdiendo fuerza la idea de hacer un Plebiscito de entrada. En síntesis, mientras la élite política empuja por un acuerdo constitucional incluyendo una nueva CC, la ciudadanía prefiere un plebiscito de entrada y una CC compuesta por representantes y expertos.

Se está produciendo, entonces, una fuerte brecha entre representantes y representados sobre el futuro constitucional de Chile.

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