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"Voy a seguir dando la pelea": Condenan a delincuente que provocó fatal accidente al huir de Carabineros

Gabriel Armijo tenía 32 años cuando un delincuente que escapaba de Carabineros en contra del sentido del tránsito por la Autopista Central impactó de frente su vehículo. Gabriel perdió la vida, dejó una hija de 3 años y a su familia desconsolada.

Tuvieron que pasar casi tres años y un largo proceso judicial para que Leonardo Mansilla, quien provocó el accidente tras delinquir durante su libertad vigilada por un robo con violencia, fuera finalmente condenado.

La desolación de una familia

"Mi hijo era un cabro trabajador, sano, tranquilo, dueño de casa... él salía de su trabajo y hacía de Uber. Su vida era generar recursos para que su hija estuviera bien", dice la madre de Gabriel, María Pilar Vásquez.

La vida de Gabriel terminó abruptamente en noviembre del 2019, cuando de regreso a casa se encontró con la frenética huida de Leonardo Mansilla. El delincuente, tan solo minutos antes había intentado robar un McDonald's en Buin junto a un grupo de ladrones.

Mansilla y sus "compañeros" habían sido sorprendidos por Carabineros, por lo que huyó por la Autopista Central conduciendo 24 kilómetros en contra del tránsito. A la altura de Lo Espejo, impactó a gran velocidad en contra del auto de Gabriel.

"El impacto fue tan grande que yo creo que él no se dio cuenta", dice María Pilar.

Delincuente condenado

Pese a la magnitud del choque, Mansilla salió corriendo de su auto y continuó su huida sin prestar ningún tipo de ayuda a Gabriel. Finalmente, Carabineros logró dar con el paradero del sujeto que cumplía una condena de 3 años y un día por un robo con violencia en el régimen de libertad vigilada intensiva.

Luego de casi tres años el Ministerio Público logró que Masilla fuera condenado por el delito de homicidio. Sin embargo, esto fue por la mínima pena legal: 10 años y un día de presidio mayor

Para la familia esta no fue la justicia que esperaban, ya que 10 años de cárcel no repararán nunca el vacío y el dolor que sienten, en especial, en una niña que hoy a sus 6 años aún extraña a su padre.

"Ella se da cuenta de todo. Que su papá no está, que por qué no está. Quiere que su papá venga, que Dios le de permiso para que venga del cielo a verla a su cumpleaños, en la Navidad, o para el Día del Niño", relata María Pilar.

Proceso contra la autopista

Pese a que hubo justicia en el ámbito penal, la familia tiene un proceso civil abierto en contra de la Autopista Central.

En comunicado, la concesionaria asegura que el día del accidente se aplicaron todos los protocolos y que se actuó de manera diligente, algo que la madre de Gabriel no comparte.

"Ellos administran una autopista que es privada, que todos para poder transitar por ahí tenemos que pagar, y si yo pago, pago, primero que nada, porque ellos dicen que es una autopista segura, que es mentira. Necesito esa sensación de que se haga justicia, la necesito. Voy a dar la pelea hasta los últimos días de mi vida", sostiene María Pilar.

La mujer insiste en que esta pelea legal es solo por el futuro de su nieta y para pagar los gastos de los médicos y abogados que ha tenido que contratar a raíz del abrupto giro que tuvo toda su vida, aquella madrugada de noviembre de 2019.