Detectan que 133 fallecidos aparecían como beneficiarios de cajas de "Alimentos para Chile" en Atacama
¿Qué pasó?
Un informe hecho por la Contraloría General de la República sobre la tercera entrega de cajas de alimentos en el marco del programa "Alimentos para Chile", arrojó que 133 personas fallecidas aparecían como beneficiarios al momento de la repartición.
De acuerdo a lo consignado por El Diario de Atacama, aún no está claro si estas personas "recibieron" las cajas, sin embargo el documento del organismo señala que "de las bases de datos rendidas por las gobernaciones a la Intendencia Regional, esta entidad de control remitió los RUN de los beneficiarios que en ella se consignaban al Servicio de Registro Civil e Identificación, el cual informó de 133 RUN correspondientes a personas que habrían recibido la caja de alimentos, los cuales a la fecha de recepción de las cajas, ya habían fallecido de acuerdo a sus registros".
Además de lo anterior, se detectaron RUN incompletos, sin dígitos verificadores y sin uniformidad en su formato correspondientes a los beneficiarios a los que sí se les hizo entrega de las cajas.
Así mismo, se informó que existió "transgresión de higiene y seguridad de las personas que prestaban ayuda con la recepción, custodia y entrega".
"El 26 de octubre de 2020, en el centro de acopio Aeródromo de Vallenar, no se tomó la temperatura en el ingreso de los funcionarios de este órgano fiscalizador", añade el informe.
La respuesta del gobierno
Al respecto, el Delegado Presidencial, Patricio Urquieta, señaló que en Atacama se entregaron más de 115 mil cajas de alimentos a personas que en su mayoría están vivas.
"Hubo una observación de la entidad de control que apuntó a 133, es decir a cerca del 0,1% del total. Revisamos los antecedentes y vimos que el informe de la contraloría confundió la fecha de defunción de las personas con la de su nacimiento en el 80% de los casos que se observó y, por ende, eran personas que estaban vivas", sostuvo la autoridad.
"El 20% restante corresponde a personas que estaban registradas previamente en los listados que llevaban los funcionarios para ir a esos domicilios a dejar la ayuda y dado que habían fallecido, la caja se entregaba en el mismo domicilio a un miembro de su familia, porque la condición socioeconómica era la misma", añadió.
En cuanto a los errores de dígitos en los RUN, Urquieta aclaró que correspondía a 22 personas, lo que es un 0,02% del proceso total, y que en ese sentido, podría haber existido un "error de digitación" en medio del "inédito esfuerzo que hicieron esos funcionarios públicos".
Y sobre el día en que no se tomó la temperatura a los funcionarios, recalcó que "eso pasa porque, por no entorpecer la labor de los fiscalizadores y para facilitar su tarea, no quieren controlarlos, pero estoy seguro que si hubieran tenido fiebre o algún síntoma parecido al Covid-19, por ningún motivo habrían ido a trabajar".
En tanto, Lucy Zepeda, directora regional del Registro Civil e Identificación, señaló al medio atacameño que "a nivel regional no se ha requerido por parte de la Contraloría ningún tipo de información relativo a la verificación de cédulas de identidad de usuarios que sean directamente beneficiarios del programa de cajas de alimento".
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