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Adolescente salió a tomarse un café con sus amigos y cuatro días después murió a causa de un ingrediente en su bebida

Un encuentro parroquial terminó con la trágica muerte de una joven de 17 años. Irene Jiménez participaba en una convivencia y en el descanso optó por salir a tomar un café que días después le quitó la vida.

La lamentable historia ocurrió en Manzanares, en Ciudad Real, España. Su deceso fue anunciado por la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción de Campo de Criptana, organizadora del evento.

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A través de un comunicado, la iglesia explicó que a la adolescente la atendieron paramédicos del servicio de emergencias y después fue llevada a una clínica, donde recibió ayuda.

Se tomó un café y era intolerante a la lactosa

Al llegar a la clínica de Alcázar de San Juan, a Irene Jiménez la internaron en la unidad de cuidados intensivos con un pronóstico grave. La joven murió cuatro días después, a pesar de que los médicos intentaron salvarla.

Irene sufrió anafilaxia. Era intolerante a la lactosa. Resulta que el café que salió a tomar con sus amigos durante el descanso de la convivencia parroquial contenía leche.

La parroquia católica explica que la adolescente sufrió un paro cardiorrespiratorio segundos después de tomarse el café.

Una fuente familiar explicó a EFE Noticias que el café de Irene era de cápsula y que se contaminó con lactosa. Al parecer, los restos quedaron en la máquina de varios cafés con leche preparados anteriormente.

El Instituto Azuer de Manzanares, donde estudiaba la joven, también elevó plegarias por su descanso. Según publica La Sexta, el alcalde Julián Nieva también ofreció condolencias a su familia. Incluso decretó el día como uno muy triste en la historia de la municipalidad debido a la forma en cómo falleció la joven.

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