Portavoz del Vaticano anuncia que "funeral por Benedicto XVI será el jueves" y "estará oficiada por el Papa Francisco"
- Por Vladimir Núñez
Tras la muerte del papa emérito Benedicto XVI a los 95 años, el portavoz del Vaticano, Matteo Bruni, anunció la mañana de este sábado que "el funeral por Benedicto XVI será el jueves 5 de enero a las 9:30 en la plaza de San Pedro y será oficiado por el Papa Francisco".
"Desde la mañana del lunes, el cuerpo del papa emérito estará en la Basílica de San Pedro, donde los creyentes podrán ir con sus plegarias y para un último encuentro con el papa emérito, para agradecerle y decirle adiós", agregó.
Además, durante su anuncio en un punto de prensa desde el Vaticano, Bruni recalcó que el funeral se llevará a cabo el jueves 5 de enero, y detalló que este comenzará "a las 9:30".
Il #5gennaio i funerali di #BenedettoXVI.
Il Papa emerito aveva ricevuto l'unzione degli infermi, mercoledì durante la Messa.@HolySeePress pic.twitter.com/gxeSHfiSV9— Vatican News (@vaticannews_it) December 31, 2022
La muerte de Benedicto XVI
"Con pesar doy a conocer que el papa emérito Benedicto XVI ha fallecido hoy a las 9:34 horas, en el Monasterio Mater Ecclesiae del Vaticano. Apenas sea posible se proporcionará mayor información", indicó en un comunicado Matteo Bruni, confirmando la muerte de Joseph Ratzinger (nombre de nacimiento del expapa).
Chile expresa sus condolencias por el fallecimiento del Papa Emérito Benedicto XVI.
— Cancillería Chile 🇨🇱 (@Minrel_Chile) December 31, 2022
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El papa Benedicto XVI, un teólogo alemán que sorprendió al mundo renunciando a su pontificado en 2013, falleció a la edad de 95 años.
Dalla mattina di lunedì 2 gennaio 2023, il corpo del Papa Emerito sarà nella Basilica di San Pietro in #Vaticano per il saluto dei fedeli. #BenedettoXVI pic.twitter.com/kRjhXPcvy0
— Vatican News (@vaticannews_it) December 31, 2022
La salud del teólogo alemán Joseph Ratzinger se había deteriorado en los últimos días, aunque el Vaticano indicó el viernes que se hallaba en condición "estable" y que había participado el jueves en la misa en su habitación del monasterio vaticano.
El funeral del papa número 265 de la historia deberá ser celebrado por su sucesor Francisco, un evento sin precedentes en los dos mil años de historia de la Iglesia Católica.
Se espera la asistencia de decenas de miles de personas, entre ellos jefes de Estado y líderes de otras religiones.
Su muerte pone fin a la insólita convivencia de dos papas, los dos con sotana blanca: el alemán Ratzinger, un brillante teólogo ultraconservador y poco popular para las multitudes, y el argentino Jorge Bergoglio, un jesuita que ha querido un papado dedicado a los pobres y a los migrantes.
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