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Le recetaron paracetamol y murió en pocas horas: Sus padres acusan una negligencia médica

Los padres de Hailey Thompson están destruidos luego de que la niña, de apenas 22 meses, falleciera tras consumir paracetamol recetado previamente por doctores del centro de salud Wigan Infirmary, en Reino Unido.

Le habían recetado ese medicamento porque se le diagnosticó un virus el pasado domingo 18 de diciembre. Eso sí, el empeoramiento de su salud comenzó a principios de este mes, cuando presentó un cuadro de tos y secreción nasal, como si fuera un resfriado.

Para su recuperación, el 7 de diciembre le recetaron antibióticos, pero estos debieron suspenderse porque la pequeña experimentó una reacción alérgica. Su situación se hizo más crítica con el paso de los días, hasta que la menor falleció, provocando el dolor de su familia, la que ahora denuncia una eventual negligencia médica.

Las últimas horas de vida de Hailey

Durante ese 18 de diciembre, Kris Thompson, su padre, encontró a Hailey convulsionando en su cama, así que llamó a una ambulancia, pero la operadora le señaló que había una espera de dos horas. Para acceder a una atención más oportuna, la llevaron al Wigan Infirmary, donde la situación no era mejor.

Como si fuera una mala jugada del destino, ese centro de salud estaba experimentando una alta demanda, a tal punto que las autoridades del recinto debieron declarar esa jornada como un "incidente crítico".

 

Hailey en los brazos de su madre Iboyla, junto a su padre Kris y su hermana.
Hailey en los brazos de su madre Iboyla, junto a su padre Kris y su hermana.

 

De todos modos, un médico pudo atender a la niña, le tomó hasta la presión arterial, pero no revisó sus amígdalas. Le dijo a Kris y a Iboyla Adam, su madre, que regresaran a su casa y mantuvieran hidratada a la menor, continuando su recuperación con Calpol, un paracetamol que tiene una versión para niños.

Tras ello, en menos de 24 horas, el 19 de diciembre Hailey falleció. Su padre la encontró inconsciente sobre su cama y le realizó maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP); pese a que fue llevada de vuelta al Wigan Infirmary, los paramédicos nada pudieron hacer para evitar su mortal desenlace.

El profundo dolor de la familia

En declaraciones a la prensa local, Kris manifestó el dolor que siente la familia tras la trágica muerte de su hija: "No podemos creer que hayamos perdido a nuestra niña. Todo ocurrió tan rápido. Algo en su cuerpo tomó el control de ella".

En ese sentido, denuncia una presunta negligencia médica: "Queremos respuestas. ¿Cómo puede morir un bebé sano mientras duerme? ¿Y por qué no se hizo la prueba de estreptococo A, escarlatina o Covid, por ejemplo?", concluyó el hombre.