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Estos son los motivos por los que tener caracoles en la casa es de "mala vibra"

De diversas formas y colores, los caracoles pueden ser vistos como pequeñas obras de arte y como regalos del mar, pero al mismo tiempo diversas culturas consideran que son desechos nada positivos para guardar en la casa.

Estas piezas de nácar llegan a la orilla tras haber cumplido una función vital. Fueron el refugio de especies marinas que ya murieron, de allí la creencia de que son de "mala vibra".

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Como los moluscos son nocturnos, los aztecas asociaron a los caracoles con la luna, mientras que los griegos los veían como un buen augurio para las cosechas, según cita el portal Caracolpedia.

Para ciudades costeras, islas y destinos caribeños es un desperdicio no aprovechar la belleza de los caracoles, así que simplemente forman parte de los souvenirs que se llevan los turistas.

Todo dependerá del cristal con que se mire, pues, si bien es cierto que el mar los arroja a la playa, podría ser porque simbolizan un regalo o porque son desechos naturales, huecos por dentro.

También se cree que los caracoles, por ser animales extremadamente lentos, representan estancamiento en proyectos, de modo que si esta creencia se impone, lo más seguro es que habrá personas que no los quieran, ni en sus casas ni en sitios de trabajo.

En el feng shui están desaconsejados los caracoles, los animales disecados, los esqueletos o las pieles de adorno, pues se asocian con la muerte. 

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