Fernanda Hansen y proceso tras hospitalización: "Estuve grave, pasaron susto los míos, pero yo digo que soy un gato"
- Por Julieta Garagay
La periodista, Fernanda Hansen, habló de su experiencia tras haber sido hospitalizada durante ocho días por complicaciones relacionadas con una cirugía ambulatoria de extracción de vesícula que se realizó el 24 de octubre.
La profesional detalló cómo fue el dolor que sintió producto de la emergencia, comparándolo con la ocasión en que se quebró la columna tras caer de un caballo en 2009.
"No tenía recuerdos de un dolor tan fuerte"
Hansen comentó que al día siguiente de su operación ambulatoria de vesícula, “me dio una puntada en el abdomen con un dolor que me quería morir, iba y venía. Ya ese jueves (2 de noviembre) me desperté con ese dolor espantoso, y terminé en urgencias”.
“Me hicieron varios exámenes, pero el doctor no sabía bien qué era. Pensaron que podía ser un cálculo que quedó de cuando me sacaron la vesícula. Le tenía que celebrar el cumpleaños a mi hija el viernes, y como soy bien porfiada y bien valiente, dije que no me dejaran hospitalizada”, agregó.
La periodista contó que le suministraron medicamentos y el dolor bajó, pero al regresar a su casa el malestar “se volvió espantoso y con vómitos. No tenía recuerdos de un dolor tan fuerte; creo que desde lo de la columna que no vivía algo tan intenso, me cuesta describirlo. De verdad me sentía muy mal”.
"Tenía varios centímetros cúbicos de bilis en el estómago"
“Yo no entendía mucho, lo hice cuando hablé con la enfermera en la UTI porque mi cabeza estaba en el cumpleaños de mi hija… Tenía varios centímetros cúbicos de bilis en el estómago que, afortunadamente, no generaron mayor daño. Estaba agradecida que dentro de lo complejo, fue lo menor y tuve suerte”, relató Hansen a LUN.
“El estómago queda sumamente sensible, duele comer, caí en anemia y estaba muy débil. Tenía todo por dentro infamado, entonces dolía dormir, sentarse y no pude manejar en tres semanas. Tengo experiencia con la inmovilidad porque estuve seis meses en cama cuando me quebré la columna”, añadió.
Por último, cerró diciendo que “estoy bien... para mí, desde acá todo es hacia arriba, estuve grave, pero estoy viva, pasaron susto los míos, pero yo digo que soy un gato”.
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