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Caso Erica Hagan: Peritaje a celular, muestras de ADN y otras diligencias podrían dar con autor del crimen

¿Qué pasó? 

A un año de que el fiscal regional de O’Higgins, Aquiles Cubillos, se hiciera cargo de la investigación por la muerte de la ciudadana estadounidense Erica Hagan, ocurrida en Temuco en 2014, nuevas diligencias han abierto una luz de esperanza en este enigmático caso que a la fecha sigue sin responsables. 

El Ministerio Público ya va en su tercera indagatoria, y es que el crimen de la joven psicóloga, quien llegó a Chile para realizar clases de inglés en el Colegio Bautista y que fue encontrada sin vida al interior de la tina en su departamento, ha resultado ser indescifrable para las policías. 

La víctima presentaba signos de haber sido golpeada en la cabeza, supuestamente con un atizador, y en el inmueble se había producido un incendio intencional. El o los autores del homicidio quemaron en la chimenea un iPhone, un iPod y otros elementos tecnológicos.

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Las dos investigaciones previas terminaron sin culpables, pese a que un hombre, el rondín de la casa donde alojaba la joven, fue llevado a juicio por los delitos de homicidio calificado e incendio. Sin embargo, terminó absuelto en 2015 y tras una demanda al Fisco recibió una millonaria indemnización.

Avance de la tecnología permitiría nuevas diligencias 

De acuerdo a La Tercera, esas mismas investigaciones actualmente son revisadas por el Ministerio Público, esta vez por el fiscal Cubillos. El objetivo es dar con alguna pista que haya sido pasada por alto. Conocedores de la causa apuntan a que el avance de la tecnología permitiría revisar elementos descartados.

Dichas fuentes, según el citado medio, señalan que hay varias diligencias claves que hoy se pueden realizar y que antes no, ya sea por el avance tecnológico tras más de una década o porque no fueron consideradas por los anteriores fiscales.

Uno de los peritajes es la revisión de uno de los teléfonos que usaba Hagan y que terminó quemado en medio del incendio que se originó en el inmueble. Se trata de un smartphone que había traído de Estados Unidos, cuya memoria es de interés para las autoridades, ya que se podrían encontrar conversaciones claves. 

De momento, se ha determinado que la joven tenía al menos cinco aplicaciones de chats en el celular. Una de ellas corresponde a una plataforma de conversaciones cristianas de la fe bautista y otra de citas. También se espera revisar muestras de ADN que no fueron identificadas en su minuto.

Nuevas declaraciones 

La Tercera reveló que los fiscales también han estado tomando declaraciones de personas que no se ubicaron en el pasado. Cubillos dio con una investigación paralela que realizó una exrectora del Colegio Bautista y que originó una carpeta realizada por peritos privados, la que tendría "cosas relevantes".

A esto se suma que la madre de Erica, Regina Down, quien reside en Kentucky, Estados Unidos, se ha mantenido en contacto con los fiscales y recientemente envió un correo a la Fiscalía de O’Higgins para hacer llegar un informe del FBI de 2016. Este informe no constaba en las carpetas anteriores y está siendo revisado por los investigadores chilenos.

Asimismo, forma parte de los peritajes la desaparición del reloj que utilizaba Hagan, arista que, para la madre, sería clave seguir para dar con los responsables. Y también se encuentran indagando si Hagan podría haber sido blanco de algún crimen. Tampoco se descarta volver a pedir colaboración al FBI.

Por ahora, la intención de la Fiscalía es dar con la verdad, independiente de si se pueda condenar al presunto responsable, ya que en 11 años los delitos podrían estar prescritos. Además, hay cinco personas que en su momento fueron sospechosos y que por ley no pueden volver a ser perseguidas por la justicia. 

Finalmente, el medio revela que una de las tesis que manejan los investigadores, de acuerdo a conocedores de la causa, es que pudo haber participado más de una persona en el crimen. Entre ellos, quienes ya fueron considerados como sospechosos en el pasado.