"Tía Rica" rematará vehículos de alta gama incautados por narcotráfico y lavado de activos
La Dirección de Crédito Prendario (Dicrep), mayormente conocida como la "Tía Rica", comenzará a rematar 1.300 vehículos de alta gama, siendo algunos incautados anteriormente en distintos procedimientos policiales.
En conversación con el matinal Mucho Gusto, Christian Barrueto, jefe de la entidad, reveló que parte de estos autos derivan de diligencias relacionadas con la Ley 20.000 y lavado de activos.
Respecto al remate, Barrueto explicó que iniciaría a fines del mes de septiembre: "Una vez ya determinada la fecha exacta, va a haber dos días previos donde se van a exhibir los vehículos. Las personas van a poder asistir a la dirección donde podrán visitarlos y examinarlos de manera directa".
En esta actividad se podrán encontrar tanto autos como camionetas, cuyo valor puede variar dependiendo del modelo de cada uno. Solo por dar un ejemplo, una Chevrolet Silverado del 2018, incautada en lavado de activos, tiene un precio base de $10 millones.
Autos de lujo y narcotráfico
Cristina Rojo, exjefa de la Policía de Investigaciones (PDI) analizó la procedencia de algunos de los lujosos autos y aseguró que "el narcotráfico es uno de los negocios ilícitos más rentables aparte del tráfico de armas, y este traduce el poder a estas organizaciones criminales".
"Comprar vehículos de alta gama le da poder (a los narcotraficantes) ante las otras personas... Hay un negocio totalmente ilícito y hay que hacer un llamado a las autoridades a que de una vez por todas hagan leyes para que las automotoras, cuando llegue una persona con $40 o $100 millones a comprar un vehículo, lo comuniquen a las autoridades", señaló.
De acuerdo a lo anterior, la experta indicó que el fenómeno de estos grupos "es demostrar poder, por ejemplo, donde ellos viven. Si vivían en una casa pobre van a adquirir una hacienda, una casa de lujo, con lo mejor posible por dentro, la mejor tecnología... eso les da poder sobre las otras personas y esa es la idea que ellos tienen".
"Aquí es un narco pequeño. No vamos a comparar un narco de Chile con Colombia y México que tienen organizaciones de más de 70 años... aquí por lo general tratan de mostrar poder con las canciones. Si mueren les hacen un dibujo en alguna pared en donde viven. Ellos se sienten muy importantes y casi santos".
