Alguna vez no hubo sueldo: ¿Cuándo y por qué fue necesario crear la dieta parlamentaria?

Durante este miércoles, la Cámara de Diputados lleva a cabo la discusión en Sala del proyecto que propone una reducción en un 50% de la dieta parlamentaria y que, además, establecería que sea el Banco Central quien fije las remuneraciones de los legisladores a futuro.

Se trata de un proyecto que fue ingresado hace más cinco años, pero que registraba escaso avance en su tramitación. Sin embargo, en el marco del estallido social que se desarrolla en el país, se retomó su discusión y ya fue aprobado de forma unánime por la Comisión de Constitución de la Cámara.

Durante su intervención en el hemiciclo, el diputado de Revolución Democrática, Giorgio Jackson -que además uno de los impulsores del proyecto- hizo alusión a la naturaleza y creación de la dieta parlamentaria, consignando que en alguna época, quienes se dedicaban a la labor parlamentaria no percibían una remuneración a cambio. 

Principio de Gratuidad

En efecto, en el Reglamento elaborado para el Gobierno Provisorio de 1814 -uno de los primeros arreglos constitucionales del país- se establecía el principio de gratuidad de la actividad legislativa. "Su servicio será sin más sueldo que la gratitud de la Patria", señala el documento, en referencia a los integrantes del Senado Consultivo.

La explicación a la gratuidad de la labor parlamentaria en la época es simplemente la inexistencia de una necesidad en la remuneración, puesto que únicamente las personas con grandes recursos económicos podían optar a ese tipo de cargos. Esta situación se mantuvo durante el período en que rigió la Constitución de 1833.

Primera dieta parlamentaria

Fue en la Constitución de 1925 donde se introduce formalmente la idea de dieta parlamentaria en Chile. En un principio, fue fijada en 2.000 pesos mensuales de la época. Con esto, se oficializa el acceso igualitario a cargos legislativos, sin importar la condición económica de quien quiera ser legislador.

Tras esto, en 1965 se dictó la Ley 16.250 que, entre otras cosas, estableció que Diputados y Senadores recibirán el mismo sueldo base de un Ministro de la Corte Suprema. Junto con esto, señala que los gastos de representación de los parlamentarios ascenderían a "tres sueldos vitales".

Constitución actual

En 1980, la Comisión Ortuzar -designada por la Dictadura Militar para la elaboración de una nueva Constitución- incluyó en la Carta Fundamental que la dieta parlamentaria ascendería al salario de un ministro de Estado, incluyendo las asignaciones que estos tienen para el desarrollo de sus labores.

En 2013, la Unión Inter Parlamentaria Mundial realizó una comparación entre las dietas que reciben los legisladores en el mundo. Según datos recopilados por el Programa para el Desarrollo de las Naciones Unidas (PNUD), el promedio de las 128 cámaras analizadas equivale a un sueldo de 5.173 dólares, es decir, el 21% de lo que gana un diputado en Chile.

El mismo estudio reveló que, al menos hasta ese año, Chile ocupaba el primer lugar entre los países con mayores dietas del mundo, con una remuneración bruta mensual equivalente a 24.599 dólares de 2013.

Gráfico de PNUD

Recomendaciones

Paralelamente, consigna que Chile también supera a todos los países en donde la labor parlamentaria es de dedicación exclusiva, a diferencia de lo que ocurre con los legisladores chilenos, quienes pueden desempeñar otras actividades remuneradas en paralelo a sus funciones, incluso ser propietarios de empresas.

Finalmente, en 2016, las Naciones Unidas recomendaban iniciar reformas para la reducción "sustantiva y gradual" de la dieta y las asignaciones parlamentarias. Al mismo tiempo, califica la instauración de la dedicación exclusiva como un "paso básico" para el funcionamiento del Congreso, aunque destaca que los conflictos de interés también emergen desde actividades no remuneradas.