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"Lo mataron por placer y por el odio que le tenían": Niño de 13 años fue torturado y quemado vivo por adolescentes

En Argentina se ha generado conmoción por la violenta muerte de un niño de 13 años, que el pasado lunes fue encontrado calcinado en la ciudad de Merlo, tras haber sido atacado por un grupo de adolescentes.

Antes de ser quemado vivo, Nicolás Alexander Cárdenas sufrió torturas hasta la muerte por parte de sus agresores, con quienes había mantenido contacto a través de sus redes sociales, lo que fue clave para avanzar en la investigación del crimen.

La principal hipótesis de los investigadores es que los atacantes "le tenían bronca y odio" a Nicolás, a quien conocían porque vivían en el mismo barrio.

El hallazgo del cuerpo

Según informó TN, en la tarde del 10 de octubre, un vecino de la localidad de Mariano Costa observó un bulto sospechoso en un campo. Sin embargo, una vez que se acercó quedó al descubierto el trágico crimen.

Unos diez metros del lugar en el que se encontraba el cuerpo, fueron halladas cenizas de una fogata y varias botellas gaseosas cortadas en el suelo.

Además de las quemaduras, el menor presentaba cortes de arma blanca en el mentón y en las dos piernas.

El resultado preliminar de la autopsia indica que la muerte de Nicolás se produjo unas 24 horas antes del hallazgo, por lo que pudo haber perdido la vida el domingo 9 de octubre.

Análisis de redes sociales

Luego del primer análisis de redes sociales, los investigadores del caso descubrieron que la víctima mantuvo conversación con tres adolescentes, las que contenían antecedentes relevantes a la causa.

En el material encontrado hay videos del momento del asesinato. Incluso, en uno de los registros uno de los agresores incitaba a regresar a la escena del crimen para registrar con su teléfono el estado del cadáver.

Tras los avances investigativos, el pasado miércoles 12 de octubre se presentó ante la policía un adolescente de 14 años junto a su madre, y quedó a disposición de la Fiscalía de Responsabilidad Penal Juvenil 2 de Morón.

En tanto, la policía aún no ha logrado dar con el paradero de los otros dos involucrados.

"Lo mataron por placer y por el odio que le tenían"

”Por los audios que pudimos escuchar y por los textos que se escribían los autores, lo hicieron para divertirse y porque también le tenían bronca", detalló un investigador.

"Lo mataron un poco por placer y otro poco por el odio que le tenían", sostuvo.

Los detectives establecieron que uno de los involucrados "tenía la fama de ser muy agresivo en el barrio y solía pelearse con otros jóvenes y luego filmar cómo los había dejado heridos".

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