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Filtran lista de espionaje del Ejército mexicano donde aparecen Mon Laferte y grupos feministas

La cantante chilena Mon Laferte fue espiada por el Ejército mexicano desde 2017 hasta hace poco más de un mes, por ser simpatizante de movimientos activistas. La revelación proviene de los documentos filtrados por el grupo de hackers Guacamaya Leaks.

Durante estos cinco años, la Secretaría de Defensa Nacional (Sedena) de México recabó información sobre la artista y otros 15 grupos feministas, según se lee en el documento “Activismo Social Relevante”, con fecha del 8 de agosto de 2022, publicó El Universal.

El Ejército recabó fichas de identidad con nombres completos, fotografías y videos. Los “papers” del Sedena muestran fechas relevantes sobre encuentros y marchas, entre otros asuntos. También registran movimientos y activistas zapatistas como Laferte, residenciada en México.

Ejército espía a Mon Laferte

En 2019, la intérprete de “Tu falta de querer” y “Mi buen amor” asistió al II Encuentro Internacional de Mujeres en Lucha. En el evento participó también la vocera del Concejo Indígena de Gobierno, María Jesús “Marichuy” Patricio Martínez, aspirante a candidata a la presidencia en 2018.

El documento “confidencial” del Sedena contiene una foto de la cantante junto a otra mujer en el acto feminista. En la imagen, el Ejército mexicano destacó a la compositora con un círculo amarillo. La acompañante fue denominada “BAZ”, para señalar a una persona no identificada.

El informe además desacredita la lucha zapatista, bajo el argumento de que los movimientos activistas usan esta ideología para obtener recursos.

Guacamaya Leaks filtró millones de documentos. Allí se descubrió que Ejército espió también a colectivos feministas mexicanos como Histeras, Coordinadora 8M, Resistencia Queer, Las Brujas del Mar, Cueva de Brujas y Colectivo Feminista de Economía del IPN, entre otros.

A partir de la polémica creada tras el hackeo del grupo mexicano Guacamaya, defensores de derechos humanos, periodistas y organizaciones civiles denunciaron por espionaje a Sedena ante la Fiscalía General de la República.

Como respuesta, el presidente de México, Andrés Manuel López, rechazó que el Ejército de su país haya incurrido en acciones de espionaje o vigilancia a opositores o periodistas. Argumentó que lo sucedido formó parte de una labor de inteligencia con el objeto de combatir la delincuencia.