Llamó para pedir ayuda y terminó detenido por femicidio: Autopsia reveló la causa real de muerte
¿Qué pasó?
Lo que parecía un llamado para pedir ayuda a la policía terminó dejando al descubierto un horrendo caso de femicidio suscitado en Nueva York, Estados Unidos, y que terminó con la detención de un sujeto que presentaba 14 arrestos por violencia doméstica.
Es el caso de Ernest Wright, quien optó por discar el 911 y solicitar apoyo ante la emergencia que, según él, presentaba su novia, de 26, quien a la postre terminó falleciendo.
Crimen que quedó a la vista tras la autopsia realizada a la mujer identificada como Kayla Estévez, quien vivía una vida marcada por abusos y maltratos sicológicos.
Dijo encontró a su novia convulsionando
El fatal suceso se registró en la habitación de un hotel en el Times Square, donde Ernest Wright aseguró al momento de pedir ayuda, que encontró a su novia en el piso y convulsionado antes de su muerte.
Así lo afirmó en su declaración, donde indicó que tras salir del lugar, por alrededor de unos 45 minutos, al volver la encontró botando espuma por la boca y con un tono azul.
Sin embargo, el examen post-mortem derribó por completo su confesión, ya que la joven presentaba traumas en su cuerpo, falleciendo por hemorragia en la garganta.
"Vivió una pesadilla perpetua de abuso"
Ante la situación, Ernest Wright quedó en calidad de detenido, ya que los fiscales a cargo del caso afirmaron que evidenciaron lesiones en el cuerpo de la víctima de violencia doméstica y que vivió "una pesadilla perpetua de abuso físico, emocional y psicológico".
Lo ocurrido conmocionó al hermano de la mujer, Michael, quien en declaraciones a Daily News afirmó que "literalmente siempre le dije: ‘vas a morir de la forma en que estás viviendo tu vida’", en alusión a los maltratos que sufría y que, a pesar de eso, no quiso dejar a su agresor.
"Me pateó con botas de punta de acero"
El acto irracional de Ernest Wright no es nuevo y así lo reveló su padre, quien aseguró que también fue víctima de la violencia de su hijo.
Esto lo reveló el hombre de 77 años, quien indicó que en su momento tuvo que llamar a la Policía en febrero del año pasado porque su hijo lo golpeó.
"Me saltó en la cama en medio de la noche, me pateó con esas botas con punta de acero", declaró el progenitor.
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