Hijo de Pablo Escobar revela detalles que darían un vuelco en la historia de la muerte de su padre
Han pasado más de dos décadas y la muerte de Pablo Escobar sigue causando versiones encontradas. La historia oficial asegura que un grupo de búsqueda de la policía colombiana junto a la DEA de Estados Unidos lo mató en el tejado de una casa en Medellín, aunque su hijo, Juan Pablo, asegura que esto no sería del todo verdad.
De acuerdo al primogénito de uno de los narcotraficantes más grandes de la década de los 80', el gobierno colombiano encubrió una serie de hechos para hacer creer a la opinión pública que ellos habían dado el golpe de gracia a Escobar.
En entrevista con El Mundo, Juan Pablo Escobar manifestó que "hay documentos desclasificados por la Embajada de EEUU que ponen en entredicho seriamente la forma y el lugar en el que murió mi padre. Esto muy probablemente cambie la historia que hasta ahora se ha querido hacer creer como cierta. Él no murió como nos han contado".
De acuerdo a su testimonio, Escobar siempre le dijo que antes de ser atrapado preferiría suicidarse, algo que desde su perspectiva alcanzó a realizar. "Me confesó que tenía 15 balas en su pistola y que 14 de ellas irían para sus enemigos y la última, para él", remarcó Juan Pablo Escobar.
Además calificó de "sospechosa" la actividad de su teléfono en la clandestinidad, puesto que sabía que podía estar siendo vigilado. "El día que murió lo usó más de siete veces a sabiendas de que su llamada iba a ser rastreada. Esto implica un deseo de dejarse encontrar a propósito", sentenció.
En la misma línea de lo anterior, explicó que "hemos hablado con los médicos forenses que nos dijeron que habían sido amenazados por el Estado colombiano para que cambiasen la autopsia y que claramente se veían signos de suicidio. Cuando una persona se suicida, queda pólvora en la piel, ante la proximidad del arma. Esto no sucede cuando el tiro te lo pega alguien desde lejos".
