Angelique Kerber dio la sorpresa y se quedó con el Abierto de Australia ante Serena Williams
Parecía todo encaminado para que Serena Williams ganara su vigésimo segundo título de Grand Slam, pero Angelique Kerber no quiso que la estadounidense hiciera historia en sus narices. La alemana se impuso en la final del Abierto de Australia y celebró el primero título de un “major” en su carrera, lo que la impulsará hasta el segundo lugar del ranking de la WTA.
La alemana, que realizó un gran tenis en tierras oceánicas se impuso en el primer set con autoridad, demostrando que podía jugar de igual a igual ante la mejor jugadora de la actualidad. Pero la menor de la Williams demostró todo su poderío físico en la segunda manga, ganándola con autoridad.
Todo se definió en un extenso tercer set, en que la germana cometió muy pocos errores no forzados y logró ganar el trofeo por un marcador final de 6/4, 3/6 y 6/4, en más de dos horas de encuentro.
De esta forma, Williams no logró igualar a otra teutona, Steffi Graf, en cantidad de Grand Slam logrados, y deberá seguir esperando para anotar una nueva marca en su bitácora.
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