¿Qué pasa si me aplico un protector solar que está vencido? Estos son los riesgos
Con la elevada radiación del sol de la actual temporada del año, el protector solar debiera ser un indispensable para todas las personas.
Antes de salir de casa, incluso estando en lugares cerrados o durante días nublados, la aplicación de este tipo de crema (ideal que sea factor 50 o 50+) es importante para cuidar la salud, ya que así disminuyen las posibilidades de sufrir cáncer de piel, por ejemplo.
Es probable que te estés aplicando un protector solar que hace tiempo tienes guardado en algún mueble de tu habitación o baño. Sin que te hayas dado cuenta, seguramente ese producto ya venció, lo que trae varias consecuencias para tu cuidado.
¿Qué pasa si me aplico un protector solar vencido?
Tal como ocurre con los medicamentos cuando superan su fecha de vencimiento, los protectores solares caducados pierden efectividad, dejando expuesta a la piel frente a los potentes rayos del sol. Por más que te apliques la crema, no servirá para protegerte.
Según consigna Mundo Deportivo, otros riesgos son quemaduras y envejecimiento de la piel después de estar un rato bajo el "astro rey". En este último caso, los rayos atravesarán la epidermis (la capa más externa) de la piel, afectando a algunas células.
Entre otras consecuencias del uso de un protector solar vencido se encuentran las reacciones alérgicas (como la urticaria, por ejemplo) y el mencionado cáncer de piel.
¿Cómo mantener mi protector solar en buenas condiciones?
Lo primero es saber cuál es la fecha de vencimiento del producto, la que viene inscrita en su envase. Si le quedan pocos meses de vigencia, será mejor ir pensando en adquirir otro en farmacias o recintos habilitados para su venta.
Generalmente, los protectores solares tienen una duración de tres años, pero la recomendación es usar uno anualmente, considerando un uso intensivo para cuidar la piel.
En cuanto a cómo mantenerlo en buenas condiciones, el portal especializado en salud, Mayo Clinic, entrega recomendaciones como evitar que el envase quede expuesto al sol directo y ubicarlo en sitios frescos.
Si la crema adquirió un color distinto o un aroma diferente y desagradable al que tenía inicialmente, debes desecharla enseguida, botándola en algún punto de reciclaje.
Este artículo está diseñado para informar y no pretende dar consejos o soluciones médicas.
Consulte siempre a su doctor o especialista si tiene dudas sobre su salud o antes de iniciar un tratamiento.
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