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¿Cómo saber cuándo se echó a perder la leche? Estas son las señales a las que debes estar atento

La leche es un alimento esencial en nuestra dieta diaria, ya que contiene una gran cantidad de nutrientes, proteínas, azúcares y especialmente calcio, elementos que son vitales para que nuestro cuerpo funcione correctamente.

Es por esto que a pesar de sus beneficios, es vital mantener la leche en buenas condiciones, puesto que consumirla en mal estado puede ser peligroso para nuestra salud.

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Para evitar que esto suceda, es importante conocer las señales que nos indican que la leche no está apta para el consumo. 

El estado del envase

La primera señal a considerar, que te puede indicar de que la leche puede estar en mal estado, es el estado del envase. Si la leche ha empezado a descomponerse, puede generar gases que se acumulan dentro del cartón, lo que causa que se inflame y sientas una presión al apretarlo ligeramente.

Además, obviamente, es importante leer la fecha de vencimiento en el envase antes de consumirla.

 

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El olor

Otra forma sencilla de saber si la leche está en mal estado es por su olor. Abre el cartón y presiona ligeramente para que el aroma salga. Si huele desagradable, agrio o descompuesto, es mejor evitarla, ya que no está en buen estado.

 

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La textura

En caso de que hayas comprobado los pasos anteriores, y tanto el envase como el olor de la leche parecen estar bien, aún puedes verificar si es segura para consumir. Sirve un poco de leche en un recipiente ancho y revisa su textura, la cual debe ser uniforme y no presentar grumos.

Además, el color debe ser opaco, y no debe haber separación entre la grasa y el suero de la leche. Si algo parece estar mal, es mejor evitarla.

 

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¿Qué pasa si bebo leche en mal estado?

Si bebes sin querer un poco de leche en mal estado, lo más probable es que no te pasará nada.

No obstante, si ingieres una cantidad moderada o grande, puedes tener síntomas de intoxicación alimentaria como náuseas, vómitos, dolor abdominal y diarrea. Si estos síntomas persisten o empeoran, es mejor buscar atención médica adecuada.

Asimismo, es importante tener en cuenta que la leche cruda puede contener bacterias peligrosas como salmonella, E. coli, estreptococos y otras, incluso aquellas que causan enfermedades graves como tuberculosis y fiebre tifoidea.

Dicho esto, si bien la pasteurización de la leche mata muchos patógenos peligrosos, al echarse a perder, existe el riesgo de que estos patógenos vuelvan a desarrollarse, lo que puede ser dañino para la salud.

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