Para que hagas más sopaipillas: Así es cómo puedes congelar el zapallo
Si compraste un zapallo entero para preparar sopaipillas durante todo el invierno, revisa cuáles son los consejos que puedes seguir para congelarlo de forma segura y así tener este ingrediente disponible por mucho más tiempo.
Se acercan días de lluvia y el cuerpo (de los chilenos) pide algo caliente y frito. Es por eso que esta es la mejor época para comer sopaipillas. No importa si las comes con pebre, mostaza o manjar, son el mejor acompañamiento de la temporada.
Conoce cómo puedes congelar el zapallo para que te dure hasta tres meses, sin perder su calidad:
¿Cómo puedo congelar el zapallo?
Este vegetal es muy versátil de tratar y, afortunadamente, no existen muchas reglas para conservarlo durante largos periodos de tiempo.
Dependiendo del uso que le vayas a dar, puedes congelarlo crudo, cocido, entero, en cubos o incluso hecho puré.
Antes de empezar, debes tener a la mano bolsas para congelar alimentos. Estas pueden ser desechables o reutilizables, pero son una alternativa más cómoda para ordenar los productos de tu freezer, en comparación con los potes.
Si vas a congelar trozos de zapallo enteros, primero preocúpate de limpiarlos bien. Remueve la piel, las semillas y las hilachas en su interior antes de iniciar el proceso.
En caso de que lo cortes en trozos grandes, deberías precongelar el zapallo. Esto se logra colocando en el congelador los pedazos, bien separados unos de otros, en un recipiente con papel de horno durante unas horas, aproximadamente hasta que estén duros.
Este paso te ayudará a evitar que se peguen entre sí con el tiempo, lo que podría hacer más difícil de sacarlos o incluso de guardarlos.
Además, si es que lo vas a congelar crudo, podrías blanquearlo antes de enfriarlo. Este paso consiste en exponer el vegetal, durante no más de dos minutos, a agua hirviendo. Según los expertos, esto podría ayudar a mantener propiedades como el color y el sabor durante más tiempo, pero es completamente opcional.
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