Estos son los tres tipos de personas que no deberían comer tanto ajo
El ajo es un delicioso ingrediente que forma parte clave de la comida chilena, es que este no puede faltar en cualquier sofrito. Pero los compuestos de este podrían causar efectos secundarios en algunas personas, especialmente si es que se consume en grandes cantidades.
La verdad es que no existe una recomendación oficial sobre cuánto ajo es el máximo que puedes consumir por día, como si ocurre con otros alimentos. Pero según el sitio Healthline, entre uno y dos dientes (lo que equivale, aproximadamente, a entre 3 y 6 gramos) de ajo al día sería la cantidad ideal para obtener sus beneficios de salud.
Conoce cuáles son algunos de los problemas que podrías presentar si es que consumes mucho ajo:
Si tomas anticoagulantes
Uno de los principales efectos del ajo es su actividad como antitrombótico. Diversos estudios han demostrado cómo los extractos de esta planta tienen la capacidad de inhibir la agregación plaquetaria (proceso en el que la sangre se aglutina y produce un coágulo) y la formación de tromboxanos, molécula fundamental en el proceso y que permite la hemostasia.
Este proceso podría aumentar los riesgos de sangrado durante una operación, por ejemplo. No es algo que ocurra con regularidad, y probablemente tu médico no te recomendará que dejes de comer ajo antes de una cirugía, pero la bibliografía médica ha reportado casos de pacientes que sufrieron de esta emergencia y que consumieron altas dosis de ajo.
Si te hinchas con facilidad
Al igual que la cebolla, cebollines y puerros, los ajos son carbohidratos altos en fructosas. Este compuesto es el responsable de la hinchazón en personas con colon irritable o sensibilidades estomacales ante diferentes comidas.
Dependiendo de cada caso, disminuir o simplemente cortar de tu dieta el ajo, podría ayudarte a evitar malestares gástricos como la hinchazón.
Si sufres de acidez
Los síntomas del reflujo gastroesofágico también empeoran cuando se consume mucho ajo, ya que este ingrediente puede disminuir la capacidad muscular del esófago. Esta estructura, y su buen funcionamiento, son los que impiden que los ácidos del estómago se devuelvan por el mismo tracto, causando la irritación de los tejidos y así la acidez.
Aún así, esto no es un problema que presenten todas las personas con reflujo gastroesofágico, por lo que deberías evaluar de forma individual o con un médico tu caso personal.
Este artículo está diseñado para informar y no pretende dar consejos o soluciones médicas.
Consulte siempre a su doctor o especialista si tiene dudas sobre su salud o antes de iniciar un tratamiento.
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