La importante renovación que hizo la Armada para la navegación en el extremo sur

¿Qué pasó?

Entre el 11 y el 17 de octubre, superando condiciones meteorológicas extremas, especialistas del Faro del Centro Zonal de Señalización Marítima de Punta Arenas, región de Magallanes, culminaron una importante renovación que ayudará a la navegación en las aguas del extremo sur de Chile.

Se trata de tres torres de ayuda a la navegación en el sector de Primera Angostura, en la Bahía Azul, zona norte de Tierra del Fuego.

Planificación y logística en terreno

Los trabajos fueron parte del Proyecto Fénix de la Dirección General del Territorio Marítimo y Marina Mercante (Directmar), coordinado por la Dirección de Seguridad y Operaciones Marítimas y el Servicio de Señalización Marítima.

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“La operación requirió la remoción de las antiguas torres y la instalación de las nuevas, con despliegue de personal y equipamiento a la aislada zona, planificando todas las fases necesarias para su ejecución”, expuso la Armada en un comunicado.

El traslado se realizó de manera bimodal: por tierra hasta Punta Delgada, cruce en ferry hasta Bahía Azul y posterior traslado terrestre hasta el área de operaciones, distante aproximadamente a tres horas y media de Punta Arenas. Para el trabajo en terreno "Los Fareros del Fin del Mundo" tuvieron que instalar un campamento que permitió coordinaciones, almacenamiento y habitabilidad, enfrentando vientos de hasta 50 km/h, lluvia, granizo, bajas temperaturas de hasta -5 °C y fuerte sol.

La Armada explicó que “el campamento fue fundamental para la seguridad y logística del personal durante toda la operación”.

Características de las nuevas torres de ayuda a la navegación

Las nuevas torres instaladas son modulares. Una de ellas, de 9 metros de altura, cuenta con estructura interna metálica, fanal giratorio con alcance de 17 millas náuticas y sistema de energía renovable compuesto por baterías de níquel cadmio y paneles fotovoltaicos. Las otras dos torres, de 3,5 metros, tienen iluminación LED con alcance de 9 millas náuticas y el mismo sistema de energía renovable, sin refuerzo interno.

Sobre los equipos, la institución señaló que “estas señales costeras cumplen un rol estratégico, marcando puntos de referencia para el control y navegación de las embarcaciones en la ribera sur del Estrecho de Magallanes”.

Apoyo aeronaval en la construcción

El Grupo Aeronaval Sur apoyó la operación mediante un helicóptero naval que transportó las piezas modulares mediante carga colgante, permitiendo su instalación en lugares de difícil acceso.

“Estas maniobras incluyen coordinaciones con personal en tierra y se realizan aprovechando las condiciones meteorológicas favorables, replicando operaciones previas en faros aislados de la región de Magallanes y Antártica Chilena”, señaló la Armada.

Las jornadas de trabajo fueron extensas, aprovechando las horas de luz para remover las torres existentes, elaborar bases de concreto, instalar sistemas de energía y levantar las nuevas estructuras. Finalmente, el 17 de octubre se concluyó la construcción, iniciándose la remoción de desechos y el desmontaje del campamento. “Los especialistas regresan con una nueva tarea cumplida, contribuyendo a la seguridad marítima de la región”, destacó la institución.

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