¿Sueldos serán congelados o subirán en 2026? La pregunta que marca la previa de la negociación del reajuste en el sector público

Llegó la época del año en que el Gobierno y la Mesa del Sector Público se preparan para la negociación del reajuste en las remuneraciones de los trabajadores públicos, la última que encabezarán los ministerios de Hacienda y del Trabajo de la administración del Presidente Gabriel Boric.

El proceso que protagonizarán ambos negociantes a partir de noviembre estará marcado por la última y reciente presentación del proyecto de ley de Presupuesto 2026 por parte del Mandatario, en el que se consigna que los sueldos de los funcionarios permanecerán "en valores nominales 2025".

A primeras, aquella frase se entiende como que los salarios en el sector público permanecerán congelados durante 2026, manteniéndose los mismos que los del presente año. Sin embargo, así no es la estrategia que busca desplegar el Ejecutivo, según la detallada precisión que debió hacer para aplacar las dudas.

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Los antecedentes que marcan la previa de la negociación del reajuste en el sector público

El ministro de Hacienda, Nicolás Grau, explicó en La Tercera que uno de los propósitos centrales del proyecto de Presupuesto 2026 es que el total de gasto en remuneraciones se mantenga estable en términos nominales. Para conseguirlo, señaló que lo principal es "limitar las nuevas contrataciones que reemplazan a gente que se retira" del sector público.

Esa limitación está expresada en el artículo 10 de la iniciativa presupuestaria: por cada tres funcionarios públicos que se acojan al incentivo al retiro voluntario, se pensionen u obtengan una renta vitalicia, se repondrá un solo cupo.

No obstante, la reposición está sujeta a un requisito: "La respectiva institución deberá contar con disponibilidad presupuestaria suficiente para financiar las reposiciones", añade el artículo. Por ejemplo, si de un organismo estatal se jubilan tres funcionarios y no hay presupuesto para una nueva contratación, uno de esos tres cupos permanecerá vacante.

Por otro lado, para que el gasto en salario público no se expanda, el Ejecutivo confía en un fenómeno que suele darse en el inicio de una nueva administración presidencial: "Dado que en marzo será el cambio de gobierno, la experiencia muestra que reponer cargos vacantes por dicho proceso toma tiempo, por lo que se produciría una contención de gastos", declaró la Dirección de Presupuestos al citado medio.

Entonces, ¿crecerán los sueldos o serán congelados para el sector público en 2026?

En palabras simples, la respuesta se conocerá una vez que se apruebe la Ley de Presupuestos 2026. Vale decir, el Gobierno y la Mesa del Sector Público entrarían de lleno en la negociación del reajuste en las remuneraciones cuando la medida presupuestaria sea aprobada por el Congreso Nacional, cuya fecha es incierta por ahora.

Lo ideal para el Ejecutivo sería que en 2026 se mantuvieran los mismos montos vigentes en 2025, pero como sabe que los gremios que componen la Mesa no se adhieren a la expectativa, está abierto a modificar la futura Ley de Presupuestos para establecer el eventual porcentaje de reajuste.

Por último, considerando lo que va de inflación en Chile y lo que se proyecta para septiembre, octubre y noviembre, es probable que la Mesa del Sector Público proponga un alza en las remuneraciones de, al menos, un 3,7%, más baja que la conseguida en la negociación en 2024 para los sueldos de 2025. 

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