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"Creemos que fue una trampa": Familiar de chilenos secuestrados y baleados en Bolivia

¿Qué pasó?

La hija de uno de los chilenos que fueron atacados en Bolivia y que recibió disparos, mientras su compañero se presume secuestrado, habló sobre lo sucedido.

Además de señalar cómo recibieron el dato de dónde estaba el camión que les habían robado en Calama, hizo un desesperado llamado a las personas que tendrían a su cuñado.

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“Nos avisaron que lo hirieron a bala”

María José Bello, hija de Mario Bello Marañao y cuñada del desaparecido Luis Alfredo Anza Achu, declaró al diario El Deber de Bolivia que la última vez que tuvo contacto con ellos fue a las 9:30 de la mañana del sábado, cuando llamaron desesperados indicando que eran perseguidos por hombres armados.

“Luego de un rato nos avisó la policía que llegó al lugar que a mi papá lo hirieron de bala, está grave, lo están trasladando, no tenemos más información. Y mi cuñado está desaparecido, no sabemos nada de él, si es que lo secuestraron”, agregó.

Luego, hizo un llamado a los medios bolivianos para que “hicieran público este audio (la vía en que se comunicó), y pedirle a las personas que tienen a mi cuñado que si quieren quedarse con el camión que lo hagan, a nosotros no nos va a interesar más el bien material”.

“Habíamos logrado muchas cosas, llegamos al Gobierno boliviano, hicimos lo que muchas personas no hicieron, pero preferimos mil veces recuperar la vida de mi cuñado, antes que seguir con estas personas, seguir buscándolos, porque probablemente haya más personas involucradas, narcotraficantes o incluso gente del mismo Gobierno, no sabemos, quizás llegamos tan lejos que tuvieron miedo”, cerró.

“Una trampa”

La chilena señaló que el día viernes "recibimos información de que el camión estaba ahí (en Bolivia), y probablemente esta persona sabía que nos iban a hacer una emboscada, tenían todo programado, porque nos insistió tanto en que el camión estaría ahí, nos envió una foto, y miren lo que pasó. Creemos que fue una trampa".

Además, acusó que las autoridades bolivianas conocían los pasos de los dos hombres chilenos, ya que "sabiendo que se dirigían a una zona roja (nosotros no lo sabíamos), no acudieron. Nos dicen lo mismo, que es un protocolo que deben seguir, que deben pedir autorizaciones para desplegar a su gente".