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¿Por qué muchos jóvenes llegaron con sus padres a sacarse el servicio militar?

  • Por Patricia Pineda

El colapso en las afueras de los cantones de reclutamiento para eximirse de la obligación de prestar el Servicio Militar es evidente; así como lo es el hecho de que muchos de los jóvenes han ido acompañados de sus padres o apoderados, acción que despertó el cuestionamiento de algunos y la aceptación de otros en las redes sociales.

Independientemente de la opinión que pueda tener el colectivo a favor o en contra de este apoyo o contención familiar, la realidad sigue siendo la misma: los jóvenes chilenos hoy más que nunca, y dada a la situación actual del país, no quieren sentirse comprometidos ni mucho menos obligados a estar bajo las órdenes de institución militar alguna, según la opinión de expertos.

¿Temor a la incertidumbre o a la institución militar?

"Si tengo pagar para no estar en el servicio, pago"; "Estoy estudiando y no puedo servir"; "Tengo problemas en la vista que me imposibilita ser reclutado" forman parte de las tantas razones expuestas por chilenos, entre 17 y 18 años, para no incorporarse a las filas de las Fuerzas Armadas, instancia que, junto a Carabineros de Chile, se encuentra en el ojo del huracán debido a su accionar ante el estallido social que vive nuestro país.

El panorama es claro y ante esta situación la socióloga Carolina Stefoni aseguró que muchos factores interactúan para que ocurra este "fenómeno"; no sin antes aclarar que en años anteriores y dada la demanda de voluntarios, el reclutamiento no fue necesario o se dio en menor porcentaje.

"Hay un desprestigio de las instituciones militares y policiales, sumado al cuestionamiento hacia éstas. Tampoco olvidemos que se han hecho público casos de abusos a personas que prestan el servicio militar por parte de funcionarios con rangos mayores", señaló la especialista que se desempeña como académica del Centro de Investigación en Sociedad Tecnológica y Futuro Humano de la Universidad Mayor.

De acuerdo a la socióloga, a este desprestigio y cuestionar, se le suma la incertidumbre que genera la crisis social actual, por lo que es común que muchos padres se pregunten: ¿Realmente quiero que mi hijo vaya a prestar el Servicio Militar?

"La incertidumbre social hace que se tomen mayores medidas de prevención y de acompañamiento. No se sabe muy bien qué es lo que está pasando. No hay una idea de orden, estamos expectantes todo el tiempo de qué va a pasar algo", explicó Stefoni.

¿Confianza en la institución familiar?

Por su parte, el psicólogo social Luis Pino precisó que este accionar de los jóvenes (que vayan acompañados de sus padres), no necesariamente corresponde al hecho que la juventud actual sea "más mamona" o "más dependiente" de su núcleo familiar; por el contrario es una maniobra que indica se están involucrando más con sus progenitores al momento de tomar decisiones.

"En un análisis más profundo podríamos decir que aunque el adolescente se está liberando de la dependencia familiar, la situación actual de Chile está uniendo lazos y mejorando los vínculos familiares. Por lo tanto que los padres acompañen a sus hijos en este proceso administrativo puede ser positivo", declaró Pino.

Satisfacción de necesidades

En otro orden de ideas, el también académico  de la Escuela de Psicología de la Universidad de las Américas, UDLA, expresó que "sin duda, y desde hace mucho tiempo se ha venido gestando una desconfianza hacia todas las instituciones y lo que ellas representan, entendiéndose por instituciones: el Estado, las ONG, el Gobierno, la Familia, entre otras".

Luis Pino manifestó que el recelo hacia estas figuras se debe a que no están satisfaciendo las necesidades del individuo: "los colegios no están satisfaciendo necesidades, Carabineros no está satisfaciendo necesidades, el Estado no está satisfaciendo necesidades... y así una larga cadena de asociaciones reales o imaginarias que desembocan en esta desconfianza y negación hacia las mismas".

Es así como el psicólogo destacó que el Servicio Militar, visto como institución, no satisface hoy en día las necesidades de un porcentaje de ciudadanos, "es decir no aporta nada en mi vida, sino que me exige cosas. Ahí podría haber una causa hacia el rechazo de ella, porque en este caso la institución impone y no satisface".

Al respecto, el académico agregó: "en los últimos años se han visto cómo instituciones autoritarias están atravesando una fuerte crisis y cuando se menciona la palabra crisis es porque ya no son referente de autoridad, debido a que el sistema de administración autoritario está en decadencia. El autoritarismo es un estilo de liderazgo y el mismo está en declive desde hace años".

Finalmente, Pino insistió en no cuestionar el actuar de los jóvenes o de sus padres en este proceso social que ha resultado complejo para todos los chilenos y las chilenas.

"No lo veamos este acompañamiento a eximirse del Servicio Militar como paternalismo, sino como una acción de inclusión. Muchos de ellos tiene 17 y 18 años de edad y no ven negativo que sus padres los acompañen (...). Se está produciendo un cambio, los jóvenes está decidiendo en qué instituciones confiar, y las instituciones autoritarias no son confiables", concluyó.