Peritaje revela que micrófonos instalados en la Sofofa no grabaron ninguna conversación
Siguen apareciendo antecedentes en torno al supuesto caso de espionaje al interior de la Sofofa, esta vez referido a los micrófonos instalados en las oficinas de su presidente Hermann von Mühlenbrock y en la del vicepresidente José Juan Llugany.
Según publicó La Tercera este domingo, desde donde tuvieron acceso al informe que se encuentra realizando la Brigada de Cibercrimen para la Fiscalía, los micrófonos no habrían grabado nada.
De acuerdo a la publicación, los chips 4G y 2G Movistar y Entel hallados al interior de los micromicrófonos espías (MME) que fueron instalado en ambas oficinas estaban vírgenes y nunca funcionaron.
Dicho esto, según publicó La Tercera en su sección de Reportajes, las sospechas de la Policía de Investigaciones (PDI) y de la Fiscalía apuntan al ex Carabinero Rubén Aros, el mismo que encontró los micrófonos en ambos lugares y quien fue contratado por el vicepresidente de la Sofofa para rastrear los dispositivos.
De ser así, la fiscalía no descarta un giro en la investigación al delito de alarma pública en contra de Aros, arriesgando penas de 541 días de cárcel, consigna el matutino.
Finalmente, el texto señala que fue el Anfión Varela, jefe de seguridad de Carozzi (donde Llugany es director), quien contactó a Aros y lo acompañó para realizar los peritajes, pero aclaran que no fue hasta que el ex sargento de Carabineros quedó solo en la oficina de Llugany que encontró los micrófonos.
En cuanto a Sofofa, Rubén Aros estuvo siempre acompañado de Priscilla Cruz, gerente de informática quien comentó que no recuerda que el detector haya emitido ninguna alerta cuando se encontró el dispositivo.
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