Excéntrico millonario de EE. UU confesó que asesinó a tres personas sin saber que tenía el micrófono encendido

Robert Durst, de 71 años, fue detenido en Estados Unidos por la policía de Los Angeles por el presunto asesinato de su ex esposa y dos personas más. La detención ocurrió debido a que cuando era grabado para el documental de HBO, a cargo del cineasta Andrew Jarecki sobre su vida, titulado "The Jinx: The life and deaths of Robert Durst", el hombre confesó sin querer la autoría de los crímenes.

En un momento de la filmación el excéntrico millonario pidió ir al baño luego de que le mostraran unas supuestas evidencias que lo implicaban en la causa de la muerte de su amiga Susan Berman en el año 2000. "Ya está. Estás atrapado. Tienes razón por supuesto. Pero no puedes imaginarlo. Arréstenlo. No sé lo que hay en la casa. Qué desastre. Él tenía razón. Me equivoqué. Estoy teniendo dificultades con la pregunta. ¿Qué demonios hice? Los maté a todos, por supuesto", afirmó, pensando que sus palabras pronunciadas no eran audibles.

Aún no se tiene claridad sobre si podrá ser utilizada la grabación porque las declaraciones fueron obtenidas cuando Durst pensaba que se encontraba en un ámbito privado.

Al empresario estadounidense se le responsabiliza el asesinato de Susan Berman, una escritora cuyo padre estaba vinculado a la mafia en Las Vegas. La mujer debía declarar días despúes de haber sido encontrado muerta en el caso de la misteriosa desaparición de la mujer de Durst, Kathleen McCormack, en 1982, cuyo cuerpo nunca apareció. 

En 2003, Durst  fue acusado por el asesinato de un vecino Morris Black, de 71 años, en Texas, pero finalmente fue encontrado inocente de los cargos.  

Según la versión oficial, Morris murió mientras forcejeaban un arma que se disparó por accidente. Durante el proceso judicial, la polícia estadounidense dijo que el multimillonario era un "asesino a sangre fría".