Tras 53 años, policía logra identificar a niño fallecido y deja al descubierto una inquietante teoría sobre su familia
- Por Cristian Latorre
¿Qué pasó?
Tras más de medio siglo de misterio, las autoridades del condado de Fairfax, en Virginia, Estados Unidos, lograron identificar a un niño de 4 años asesinado en 1972, cuyo cuerpo fue hallado debajo de un puente con evidentes signos de haber sido golpeado hasta la muerte.
Durante 53 años, su identidad permaneció desconocida, pero gracias al uso de tecnología de genealogía forense y una pequeña muestra de cabello, finalmente se pudo saber su nombre: Carl Matthew Bryant.
Desde su hallazgo, la comunidad local había apodado al menor como “Charles Lee Charlet” y fue sepultado con ese nombre en el cementerio Coleman de Alexandria.
Su genealogía forense sirvió para dar con el paradero de su madre
El avance fue informado el lunes 4 de agosto por el Departamento de Policía del Condado de Fairfax, quienes detallaron que el ADN fue extraído de apenas unos milímetros de cabello que permanecía en los restos del menor.
Esa muestra permitió rastrear a una familia en Filadelfia, quienes revelaron que una pariente fallecida, Vera Bryant, había perdido a su hijo Carl luego de viajar a Virginia en 1972 junto a su novio y sus dos hijos.
Con esa información, las autoridades exhumaron el cuerpo de Vera para confirmar un posible vínculo genético. Las pruebas confirmaron que era la madre del niño, cerrando así un caso abierto por más de cinco décadas.

Los padres de Carl podrían ser los presuntos asesinos
Las autoridades creen que Vera Bryant y su pareja, James Hedgepeth, fueron los responsables del crimen. Ambos están fallecidos: Vera murió en 1980 y Hedgepeth —quien tenía antecedentes penales de violencia y una condena por asesinato— también ha muerto.
Sin embargo, el caso no está completamente cerrado. Los detectives buscan ahora el cuerpo del hermano menor de Carl, James Bryant, quien tenía apenas seis meses de vida cuando desapareció junto a su familia en 1972. Se sospecha que pudo haber sido asesinado y arrojado en la misma ruta que recorrieron sus padres ese año.
“Podemos recuperar su nombre, podemos devolverle su nombre a su lápida y la familia podrá tener una sensación de cierre o resolución”, declaró la detective Melissa Wallace, del Departamento de Policía de Fairfax.
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