Tragedia de Chapecoense: El sueño que se convirtió en la peor pesadilla
El 28 de noviembre de 2016, 77 personas subieron al avión de la aerolínea LaMia que partió desde Santa Cruz de la Sierra en Bolivia con destino a Medellín, Colombia. En el aparato iban jugadores y cuerpo técnico del humilde equipo Chapecoense, el cuadro revelación de la Copa Sudamericana que por primera vez en su historia disputaría la final del torneo, un sueño que se convirtió en la peor pesadilla.
Cerca de las 22:15 horas el aparato se precipitó a tierra por causas que aún son materia de investigación. Una falla eléctrica y falta de combustible habrían provocado la tragedia que dejó 71 víctimas fatales. Solo seis personas, tres futbolistas, un periodista y dos tripulantes salvaron con vida.
El portero Jackson Follman sacó la peor parte de los sobreviventes. Se le amputó una pierna producto de las serias lesiones causadas por el accidente. Sus compañeros Hélio Neto y Alan Ruschel se recuperan del fuerte impacto, aunque aún no se sabe si volverán a las canchas.
El periodista Rafael Henzel, la azafata Ximena Suárez y el técnico aeronáutico Erwin Tumiri salvaron con traumatismos leves y fueron dados de alta dos semanas después de la tragedia.
El accidente destapó varias irregularidades de la aerolínea boliviana y deja algunas interrogantes. Las investigaciones posteriores revelaron que el mismo avión siniestrado viajó a menos ocho veces sin el combustible mínimo para emergencias, e incluso en uno de los vuelos trasladó a la Selección Argentina de Fútbol.
Finalmente Chapecoense fue declarado campeón de la Copa Sudamericana, y pronto debe retomar sus compromisos deportivos. La dirigencia del club contrató a un nuevo técnico y reforzará su plantilla, que quedó reducida a solo nueve jugadores.