El truco más sencillo y seguro para eliminar un chicle pegado a tu ropa
- Por Meganoticias
¡No te desesperes! Ver un chicle pegado a tu ropa favorita puede ser un verdadero dolor de cabeza, pero afortunadamente, la solución está en tu propia cocina. El truco del congelador es el más recomendado por ser sencillo y completamente seguro para la mayoría de los tejidos, ya que no requiere productos químicos ni calor que pueda dañar las fibras.
La clave reside en el cambio de estado del chicle. Cuando está a temperatura ambiente, es gomoso, elástico y altamente adhesivo. Al someterlo a las bajas temperaturas del congelador, el chicle se endurece hasta volverse rígido y quebradizo, perdiendo toda su pegajosidad y haciendo que sea muy fácil de desprender.
Dobla cuidadosamente la prenda para que el área del chicle quede expuesta, y luego introdúcela en una bolsa de plástico hermética (como una bolsa con cierre zip). Es fundamental que el chicle no toque la bolsa ni la pared del congelador, para que no se pegue a nada más.
Coloca la bolsa en el congelador y déjala allí durante al menos 2 o 3 horas. El objetivo es que la goma esté completamente sólida, "dura como una piedra". Si tienes prisa, otra opción es aplicar un cubo de hielo directamente sobre el chicle.
Una vez que esté bien congelado, saca la prenda. Con la ayuda de una herramienta de borde romo (una tarjeta de crédito que ya no uses, un cuchillo de mantequilla o una espátula de plástico), raspa la goma con movimientos suaves y precisos. El chicle se fracturará y se despegará sin esfuerzo de las fibras.
Aunque hayas quitado la mayor parte, es posible que queden pequeños residuos o una mancha de grasa. Para esto, simplemente lava la prenda en la lavadora como lo haces habitualmente, siguiendo las indicaciones de la etiqueta. Si la mancha persiste, aplica un poco de detergente líquido directamente sobre la zona antes de lavarla.
¡Y listo! Tu prenda estará como nueva y habrás resuelto un problema común de manera eficaz y sin complicaciones.
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