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Así es cómo debes hacer la cama para no pasar frío en invierno

Las noches se han vuelto más heladas desde que llegó el otoño y, al parecer, las olas de frío se podrían repetir durante el resto del invierno.

Aunque no lo creas, regular bien la temperatura es uno de los factores claves para garantizar que tengas una mejor noche de descanso. De hecho, según la experta en ciencias del sueño de Emma The Sleep Company, Emma Merrit, tu habitación ideal debería estar a unos 18 °C para el buen descanso. 

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Pero como no siempre puedes regular la temperatura de tu pieza, lo más fácil de modificar es la ropa con la que duermes o la ropa de cama. 

Por ejemplo, puedes partir eligiendo un buen pijama, que ojalá sea fabricado con telas naturales y respirables, como el algodón.

"Es fundamental sumar pijamas completos (pantalon-polera), para mantener la temperatura corporal del cuerpo; sobre todo si se vive en hogares más fríos o con menor capacidad de calefaccionar", añade en un comunicado la experta en sueño.

¿Cómo hacer la cama para evitar el frío?

 

Freepik

 

La clave, según Merrit, es seguir la misma lógica que se suele recomendar para vestirte en invierno: hacerlo en capas. 

"Dormir con capas facilita la termorregulación, ya que la temperatura corporal central fluctúa a lo largo de la noche, alcanzando su punto más bajo alrededor de las 3 o 4 de la mañana", explica la especialista.

Emma Merrit recomienda cumplir con el siguiente orden al momento de hacer la cama en capas:

  1. Cubrecolchón. Esta pieza de tela permite que tu colchón dure por más tiempo, pero también disminuye la humedad y mejora la sensación de la temperatura.
  2. Opcional es el calientacama, que aporta temperatura constante y de manera artificial. 
  3. Sábanas. La primera capa que te protege del frío será más abrigadora, mientras más sean los hilos con que fue fabricada. Estas también deberían ser idealmente hechas de telas naturales y respirables, como el algodón o lino, y en caso de que seas muy friolento, pueden ser de franela.
  4. Polar. Una buena frazada de polar es clave para aislar las bajas temperaturas del exterior, conservar la temperatura bajo las sábanas y sin un incómodo peso extra.
  5. La capa exterior debería ser un plumón, ya sea relleno de fibras sintéticas o plumas. En caso de no contar con uno, recomiendan aumentar la cantidad o el grosor de las frazadas. 

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