No es solo una expresión: ¿Por qué se dice que estamos hechos de polvo de estrellas?
Teorías sobre el origen del universo abundan y lo que se sabe hasta el momento es que estuvo repleto de eventos tumultuosos, como explosiones, colisiones y fenómenos climáticos extremos. Sin embargo, poco se habla sobre cómo ese proceso culminó en vida humana.
En su más reciente libro, llamado "Lo que está dentro de ti: la historia de los átomos de tu cuerpo", el documentalista de ciencia e historia, Dan Levitt, trazó el largo viaje de los átomos desde el Big Bang hasta el cuerpo humano.
Levitt reconstruyó el paso a paso de aquellos elementos y de otras moléculas orgánicas más complejas para llegar hasta nosotros y, en ese proceso, descubrió las hipótesis que varios científicos habían elaborado sobre cómo los componentes básicos de la vida comenzaron a tomar forma.
¿Por qué se dice que estamos hechos de polvo de estrellas?
Decir que "estamos hechos de polvo de estrellas" no es solo una expresión. Según CNN, Levitt explicó que nuestros cuerpos contienen cerca de 60 elementos, incluido el torrente de hidrógeno liberado después de la Gran Explosión y el calcio forjado por estrellas moribundas conocidas como gigantes rojas.
En este sentido, el autor afirmó que "nuestro universo está repleto de moléculas orgánicas, muchas de las cuales son precursoras de las moléculas de las que estamos hechos". Eso sí, esto no significa que nuestra travesía desde el Big Bang haya sido fácil.
Levitt también destacó que el transcurso en el que evolucionó la vida, a partir de las primeras moléculas orgánicas, tuvo que haber sido "irregular, lleno de caminos retorcidos y fallas (...) Pero la evolución tiene una forma de crear ganadores a partir de innumerables experimentos durante mucho tiempo".
Si hablamos de los humanos, en concreto, de acuerdo al físico nuclear Paul Aebersold, "cambiamos la mitad de nuestros átomos de carbono cada uno o dos meses y reemplazamos el 98% de todos nuestros átomos cada año".
La naturaleza tiene una forma de reciclar los componentes básicos que permite su renovación constante. En nuestro caso, se reemplazan partes viejas por otras nuevas, como por ejemplo, nuestra agua, proteínas y células.
Incluso, al momento de dejar de existir, nuestras células volverán a ensamblar otras formas de vida. Algo muy parecido sucede con las estrellas, que de manera extraordinaria y única, se reproducen al morir.
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