Brooke Shields recuerda el anuncio de jeans que grabó a los 15 años y que causó revuelo: "Fui ingenua"

  • Por Meganoticias

Paralelamente a su fama lograda al protagonizar “La Laguna Azul”, Brooke Shields fue la estrella de varios comerciales a sus escasos 15 años.

Un revuelo causado por uno de estos clips, la convirtió en el centro de una polémica en la que fue acusada de sexualizar su cuerpo.

Ya han pasado un poco más de cuatro décadas y en una entrevista con la revista Vogue, la hermosa actriz recordó el penoso episodio ocurrido cuando corría el año 1980, siendo una adolescente sin experiencia en el mundo del entretenimiento.

La belleza de la espigada actriz aún es alabada por sus millones de fans que nunca olvidaran su aparición en el icónico film que se convirtió en un éxito taquillero de la época, mostrando dos jovencitos que sobreviven a un naufragio en medio de una isla solitaria.

Cuestionada inocencia de Brooke Shields en los 80

Desde su cuenta Instagram, Brooke Shields hizo un retroceso en el tiempo y recordó a todos sus seguidores una experiencia que vivió en 1980 en su país, cuando era una adolescente que cientos de paparazzi deseaban fotografiar en todo momento.

“Hola, soy Brooke Shields y creo que tenemos que hablar sobre los anuncios de Calvin Klein”, así presentó la actriz un video de 10 minutos en el que explicó su posición sobre el icónico comercial que aún perdura en la mente de millones de personas.

Su rostro, con facciones impresionantes la convirtieron en una joven que enamoraba y eclipsaba a su paso. Y es precisamente la mezcla de su belleza y la inocencia que transmitía, lo que fue utilizado en su contra en una recordada polémica.

Brooke reveló en la entrevista cómo enfrentó el controversial revuelo que se formó en el pasado cuando pronunció la célebre frase: “¿Quieres saber lo que se interpone entre mis Calvin Klein y yo? Nada”, en el comercial que la mostraba con unos ceñidos jeans, una blusa color café y botas vaqueras.

A sus 56 años, la protagonista de “La Laguna Azul”, calificó como “ridícula” la posición en la que sumieron los medios y reporteros a ella y a su madre, al acusarla de “utilizar la sexualidad” en un clip en el que años más tarde entendió el doble sentido que se utilizó en las palabras que pronunció.

“Fui ingenua, no pensé nada en eso... No pensé que tuviera que ver con la ropa interior. No pensé que fuera de naturaleza sexual”, confesó en la entrevista.

Recordó que luego comenzó a recibir información de que el comercial había sido prohibido en algunos estados de Estados Unidos y en Canadá.

“Había paparazzi y gente gritándome y gritándole a mi madre: “¿Cómo pudiste? Me pareció tan ridículo todo el asunto”, dijo al analizar muchos años después las consecuencias del video.

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