Joven desaparecida en Peñalolén es vista en Quilpué: la teoría que maneja la madre sobre su salida de la RM

¿Qué pasó?

A casi una semana de la desaparición de Mariana Castillo de 17 años, su madre, María Angélica, afirmó que fue vista caminando por Quilpué, Región de Valparaíso, lo cual quedó registrado en cámaras de seguridad.

"Está comprobado porque yo vi las imágenes"

Al respecto, María Angélica señaló en Mucho Gusto que “está comprobado porque yo vi las imágenes, que mi hija pasó por las afueras del Líder de Peñablanca caminando hacia arriba donde hay unas palmeras, pero ahí se le pierde la pista. No sabemos para dónde se fue, si se encontró con alguien, si alguien la pasó a buscar o si ella pidió trasladarse o si definitivamente siguió caminando”.

“Ella estaba caminando normal porque mi guagua no es de caminar rápido, sino que ella es lenta, es tranquilita para hacerlo y al momento de yo verla me fijé que ella estaba súper tranquila buscando algo, me da la impresión que una dirección, algún lugar donde encontrarse con alguien, porque se notaba al caminar que no estaba asustada”, añadió.

En esa línea, dijo que “yo me trasladé a Quilpué, a Villa Alemana primero, porque necesitábamos comprobar que era Mariana a través de las cámaras. Al comprobar que era ella me quedé establecida porque acá está, pero no sabemos en qué zona”.

Teoría de la madre

Con respecto al motivo que habría tenido Mariana para trasladarse a la región de Valparaíso, la mujer indicó que “para mí lo que más toma fuerza y lo que representa la desaparición de mi hija es que vino a encontrarse con alguien, no sé si con una persona o con un grupo de amigos. Mi teoría es más que nada con una sola persona, porque Mariana no es una niña crédula, ella es una niña bien entera, es íntegra, es adolescente”.

“Para mí hay un hombre mayor que trabajó a mi hija hace muchos meses”, recalcó.

En cuanto al contacto, María Angélica cree que hubo comunicación por plataformas menos conocidas “porque por Facebook e Instagram es fácil revisar, cualquiera se puede meter porque son públicas”.

Además, afirmó no hay “nada que indique con quién se podría haber estado comunicando, siempre con las mismas personas, la familia, el papá, su herma y yo, entonces aquí debe haber estado una persona trabajando a mi hija mínimo seis meses atrás para que la pudiera convencer de que hiciera algo así”.

“Mariana no conoce esta zona, no conoce nada porque no sale si no es con la familia, entonces tiene que haber tocado un punto tan delicado de mi hija, el 10% que yo no conozco, que la convenció de algo, la engatusó o le dijo ‘no te preocupes’”, sostuvo.

“Ahora yo pienso muchas cosas, mi cabeza da vueltas, yo no quiero encontrar la razón ni el motivo, solamente quiero saber qué hizo o hicieron con mi hija, porque definitivamente Mariana viajó por su voluntad, ella estaba convencida de que iba a encontrarse con alguien allá, tenía su pasaje en el teléfono. Ella no tenía dinero para comprarlo, no tenía acceso ni a tarjeta de débito ni de crédito, de nadie”, expresó.

Finalmente, manifestó que “ella definitivamente se vino a encontrar con alguien y ese alguien me asusta”.

La desaparición

El lunes 22 de noviembre Mariana salió de su casa en Peñalolén rumbo al colegio, sin embargo, en el camino se dirigió hasta un paradero donde tomó una micro que la dejó en el mall Quilín. Posteriormente, se subió al Metro y en estación San Pablo hizo un retorno bajándose en Estación Central.

Desde entonces su familia comenzó una intensa búsqueda para dar con el paradero de la joven.