Esto pasa con tu cuerpo cuando comes cebollas todos los días

La cebolla es un ingrediente clave en la alimentación de los chilenos. Se utiliza en sofrito, ensaladas, pastas, incluso podrías encontrar mermeladas.

Este alimento natural aporta una serie de beneficios, gracias a sus completos componentes naturales, como vitaminas B, vitamina E, zinc, cobre, luteína y una serie de nutrientes más que actúan como poderosos antioxidantes.

Revisa cuáles son algunos de los efectos que podría tener en tu cuerpo consumir cebollas regularmente.

Podría empeorar el colon irritable

Si sufres de problemas gastrointestinales, como el colon irritable, puede que la cebolla no sea el mejor ingrediente para ti. Esta es una condición que produce desagradables síntomas como hinchazón, dolor abdominal y cambios en la frecuencia con que vas al baño. 

Este no es un desorden que tenga una cura establecida, pero los malestares pueden ser controlados con cambios alimentarios. 

Por eso las cebollas no serían buenas, ya que estas podrían desencadenar los malestares típicos del colon irritable.

Te puede dar acidez 

Otras de las condiciones gastrointestinales que pueden ser afectadas por las cebollas es el reflujo gastroesofágico, un problema médico que ocurre cuando la comida en tu estómago se devuelve por el esófago, causando irritación y acidez.

Según explican en Healthline, las cebollas promueven la relajación del músculo que separa el esófago del resto del tracto, el esfínter esofágico inferior, lo que podría promover que ocurra el reflujo.

Podría prevenir enfermedades

Gracias a su alto aporte en antioxidantes, las cebollas podrían contribuir a proteger tu cuerpo de ciertas enfermedades bastante comunes.

Según explican en BBC good food, cuando se consumen regularmente, los más de 25 flavonoides (un tipo de antioxidante) que contienen las cebollas han demostrado proteger contra enfermedades crónicas como la diabetes o el cáncer.

Tu aliento olería mal

El mismo potente aroma que sientes al pelar, cortar y cocinar las cebollas podría impregnar tu organismo. Al igual que con el ajo, después de comer cebollas no es de extrañar que quedes con un problema de halitosis, de manera temporal.

Incluso con métodos tradicionales como el cepillado de dientes, el hilo dental o el chicle, podría no ser suficiente para tratarlo. 

Ayudaría con la salud de tu corazón

Dentro de los mismos flavonoides que te protegen de enfermedades se encuentra la quercetina, un antioxidante que además contiene propiedades inflamatorias que apoyarían con la salud de tu corazón. 

En BBC listan algunas investigaciones que sugieren que comer cebollas ayudaría a disminuir el riesgo de padecer una enfermedad cardiaca, gracias a que disminuye la inflamación, presión sanguínea y permite controlar el colesterol. 

Podrían alterar ciertos medicamentos

Según detallan en el portal WebMD, quienes consumen algunos fármacos deberían tener cuidado con la cantidad de cebollas que comen regularmente, pues alterarían la función de los medicamentos.

En el sitio explican que existe una interacción media de las cebollas con la aspirina, anticoagulantes, ciertos fármacos para la diabetes, entre otros.

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