Carla Ballero entregó desgarradores detalles de la grave neumonía que la tuvo en coma: "Pensaban que estaba sedada, sentía todo"
El pasado 13 de junio, Carla Ballero recibió el alta médica tras enfrentar uno de los episodios de salud más delicados de su vida. La exmodelo estuvo en coma debido a una neumonía bacteriana, la que derivó en otras complicaciones como un derrame pleural.
Esta compleja situación la mantuvo alejada de la televisión por más de dos meses. Afortunadamente, Carla logró recuperarse y este lunes retomó parte de sus compromisos laborales, incluyendo su rol como panelista en el programa "Sígueme".
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Sus compañeros de espacio le dieron una cálida bienvenida y aprovecharon de conversar en profundidad sobre su proceso que vivió. Consultada sobre cómo se siente actualmente, Carla destacó que "físicamente, volví a estar mucho mejor que cuando me fui de acá".
En este sentido, explicó que cuando fue ingresada a la clínica se encontraba en estado de desnutrición. "Me dijeron que por eso llegue a estar punto de morir, porque soy muy joven como para terminar de esa manera, [para que la neumonía] me afectara a tal nivel", partió comentando.
Además, detalló las molestias que experimentó antes de llegar a urgencias, las cuales decidió ignorar. "Me sentía sobrepasada, muy cansada, deje de entrenar, no tenía fuerzas para hacerlo (…) Un día me vi en el monitor y me di cuenta de que estaba muy delgada… estaba como en piloto automático", relató.
Aquellos síntomas comenzaron a empeorar al punto en que "ya no podía respirar, empezaba a caminar y me caía (…) Cuando llegué a la clínica yo ya era un muerto… yo me di cuenta de que me estaba muriendo. Dije 'me sedan y no vuelvo'".
Uno de los momentos más críticos ocurrió durante su estadía en la UCI, cuando debió ser intubada. "No me pudieron dormir. Estaba despierta mientras me preparaban, y ellos pensaban que yo ya estaba sedada. Sentía todo, estaba consciente. Fue como estar viva-muerta", recordó, visiblemente afectada.
Finalmente, Carla reflexionó sobre lo que aprendió tras esta dura experiencia. "Me di cuenta de que no había disfrutado la vida (…) Me puse en el límite por no ser una prioridad, por no cuidarme. La vida es corta y hay que vivirla", expresó.
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