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Tren Santiago-Valparaíso: Gigante francesa que construye trenes a hidrógeno verde se interesa en proyecto

¿Qué pasó?

La empresa francesa orientada a la fabricación de ferrocarriles, Alstom, ha confirmado su interés por participar en la licitación del proyecto del tren Santiago-Valparaíso, que fue anunciado por el presidente Gabriel Boric el pasado 10 de enero.

De acuerdo a las palabras del director general de Alstom Latinoamérica, Michel Boccaccio, la empresa tiene intenciones de proveer todo lo necesario para el proyecto, "trenes, tecnología y construcción".  

Alstom actualmente trabaja con Metro de Santiago en la construcción de trenes para la línea 7, además de colaboraciones en el pasado.

Tren sustentable

Según recogió Diario Financiero, uno de los focos del fabricante europeo consiste en desarrollar locomotoras que funcionen con energías renovables, específicamente, con hidrógeno verde y que se pueda replicar en diversos trazados del mundo.

Cabe recalcar que la empresa, con sede en Saint-Ouen, Francia, cuenta con trenes impulsados por hidrógeno verde desde el año 2018 en Alemania, no obstante, tiene planeado desarrollar un producto preparado para lidiar con condiciones climáticas adversas, carga pesada y altura.

Por este mismo motivo, debido a su geografía y clima divergente, el país elegido para probar esta nueva tecnología fue Chile.  En esa línea, la primera máquina funcionaría desde el puerto de Mejillones hasta la minera Zaldivar de Amsa, a más de 2 mil metros de altitud. 

¿Qué se necesita para un tren con hidrógeno verde?

Si bien la utilización de combustibles renovables podría ser un acierto en cuanto a la independencia del petróleo, se necesitan diversos factores para poder llevar a cabo un tren con funcionamiento sustentable.

En primer lugar, se debe tener en cuenta la capacidad y la autonomía del método de transporte señalado y, por otro lado, el hidrógeno verde debe ser almacenado en un espacio a bajas temperaturas.

Para Boccaccio esto será un "desafío tecnológico", ya que en ciertos lugares, como el norte de Chile, las temperaturas alcanzan los 45 grados. No obstante, el fabricante francés es optimista en cuanto a los tiempos de trabajo.