Plebiscito de Salida 2022 tuvo la menor participación histórica de voto obligatorio
Después de más de una década, el Plebiscito de Salida 2022 exigió el voto obligatorio de millones de ciudadanas y ciudadanos en las urnas, proceso que finalmente dio por ganadora a la opción del Rechazo, la que alcanzó más del 60% de las preferencias.
Con esto, se mantendrá la vigencia de la actual Constitución de 1980, la que fue creada en plena dictadura militar y que fue reformada en los gobiernos democráticos posteriores. Algo que podría repetirse durante la administración del Presidente Gabriel Boric, quien promete recoger las distintas visiones para eventualmente iniciar una nueva etapa constituyente.
A pesar del voto obligatorio, este Plebiscito no fue el que más convocó; de hecho, tuvo la participación más baja, considerando procesos que contemplan la obligatoriedad del sufragio. El último en tener esta modalidad fue la segunda vuelta presidencial de 2009, cuando se enfrentaron los entonces candidatos Sebastián Piñera y Eduardo Frei Ruiz-Tagle.
El detalle de la baja convocatoria
Esas elecciones, las que dieron por ganador al exPresidente Piñera, obligó a todos los mayores de 18 años a votar en las urnas, reuniendo el 86,94% de participación.
Casi 13 años después, en el retorno del voto obligatorio —solo para este referéndum—, el Plebiscito por la eventual implementación de una Nueva Constitución logró el 85,64%, siendo el proceso con menos participación en elecciones con voto obligatorio.
En la otra vereda, el proceso que más participación tuvo en la historia eleccionaria de Chile fue en las presidenciales de 1989, con un 94,72%, dando ganador al Patricio Aylwin Azócar, el primer Presidente desde el retorno a la democracia.
Las virtudes del voto obligatorio
El analista político, Mauricio Morales, plantea en Meganoticias que "institucionalmente, el voto obligatorio reduce las brechas socioeconómicas en términos de participación electoral. Ya no nos vamos a encontrar con este resultado de que Las Condes, Vitacura y Lo Barnechea votaban en un 70%; y La Pintana, en un 35%".
"Las cifras se van a ir estrechando, lo que es muy bueno, porque: a participación desigual, representación desigual. Entonces, el voto obligatorio contribuye muchísimo a equilibrar los resultados, independiente del nivel socioeconómico de las personas. Podemos hablar de más y mejor democracia", recalcó.
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