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Inflación en Argentina sufre nueva alza y llega a los 160,9% interanual

¿Qué pasó?

La inflación en Argentina llegó en noviembre a 160,9% interanual, después que el índice de precios al consumidor (IPC) creciera un 12,8% en comparación con octubre, de acuerdo a lo informado este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

En tanto, la inflación acumulada en 2023 alcanzó 148,2%, uno de los más elevados del mundo, piso incómodo para el recién iniciado gobierno de Javier Milei, quien anunció un plan de emergencia para ordenar las finanzas públicas y frenar el constante aumento de precios.

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¿Qué rubros registraron mayores alzas?

Los rubros con mayores alzas fueron Salud (15,9%), Alimentos y bebidas no alcohólicas (15,7%) y Comunicación (15,2%), por los incrementos en servicios de telefonía móvil e internet.

AFP

Las dos divisiones que registraron las menores variaciones en noviembre fueron vivienda, agua, electricidad y otros combustibles (7,1%); y educación (8,3%).

La alta inflación ha sido un mal crónico en Argentina, que ya en 2022 había cerrado con un IPC al alza de 94,8%, graficando una notable aceleración con respecto al 50,9% de 2021.

Plan de emergencia de Javier Milei

Para combatir la inflación y el déficit de las finanzas públicas, Milei anunció un programa de austeridad que incluye la reducción de subsidios a las tarifas de energía y de transporte, así como la paralización de obras públicas financiadas por el Estado que aún no han comenzado.

Además, decretó una devaluación de la moneda de más de 50%, llegando a 800 pesos por dólar al tipo de cambio oficial, dentro de un régimen de control de divisas que contempla una decena de tipos de cambio diferentes.

"La clave de la devaluación es que se pueda bajar drásticamente la brecha" entre el tipo de cambio oficial y el paralelo, que este miércoles cerró sin cambios en 1.070 pesos por billete verde, opinó el exviceministro de Economía Gabriel Rubinstein.

Milei advirtió que los próximos meses serán "duros", y que las cosas se pondrán peor antes de mejorar. Pero asegura que intenta evitar una "catástrofe" como sería la hiperinflación, que ya vivió Argentina en 1989 y en 1990.