Celiaquía: Cuáles son los daños que ocasiona el trigo a los pacientes con esta condición

Uno de los ingredientes más usados como base para hacer alimentos como el pan, los tallarines, la lasaña y hasta dulces, es el trigo.

El olor de pan recién sacado del horno o el de una rica lasaña, sin duda, son irresistibles. Al sentirlo se nos hace agua la boca. Sin embargo, no todas las personas pueden, ni deben consumir trigo, entre ellas las que sufren de celiaquía, pues casi de manera inmediata reaccionan con alergias o síntomas estomacales.

Según los especialistas, el consumo del trigo en los pacientes con esta condición abarca síntomas que afectan desde el aparato digestivo hasta el sistema nervioso.

¿Qué es el trigo?

El trigo es conocido como un cereal perteneciente al género Triticum, asociado a la familia del arroz, el maíz y la avena; del cual se obtienen varios alimentos como la harina.

De acuerdo a los nutricionistas, la parte del trigo destinada al consumo humano es el grano, cuyos componentes principales son la fibra, el almidón, la celulosa, el gluten, fitosteroles (como el beta-sitosterol) y la vitamina E.

De todos estos componentes, el gluten constituye uno de los ingredientes más dañinos para las personas diagnosticadas con celiaquía.

El sitio celiacos.org precisa que el gluten es la proteína "responsable de la elasticidad de la masa de harina y confiere la consistencia y esponjosidad de los panes y masas horneadas. Por este motivo es apreciado en alimentación, por su poder espesante".

En el proceso del horneado, el gluten es el responsable de que los gases de la fermentación queden retenidos en el interior de la masa, haciendo que esta suba.

¿Qué daños produce el trigo al organismo?

La enfermedad celíaca es una afección causada por el daño al revestimiento del intestino delgado, causada por una reacción al consumo del gluten, de acuerdo a la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, Medlineplus.

Las reacciones o síntomas que se producen al consumir trigo, en su mayoría, son digestivos; no obstante y en algunos casos el organismo se puede ver afectado de otra manera con este cereal. Todo depende también de cómo el paciente absorba al alimento.

Diarrea crónica, pérdida de peso, deposiciones abundantes y con grasa, anemia inexplicada, dolor abdominal recurrente y gases forman parte de los signo digestivos que se manifiestan en las personas con enfermedad celíaca al consumir trigo.

A estos se le suman otros como: calambres musculares, cansancio, retraso en el crecimiento, úlceras en la boca, osteoporosis, erupciones cutáneas y hasta dolor de cabeza.

Algunas personas con enfermedad celíaca no desarrollan ningún síntoma. Esto se debe a que la parte no dañada de su intestino es capaz de absorber suficientes nutrientes para prevenirlos.